A ello se une una riqueza patrimonial e histórica inigualable, que se deja ver no sólo en sus museos, sino también en sus edificios, sus monumentos y sus calles. Tradición y vanguardia conviven en armonía, abriendo sus puertas a una sociedad cosmopolita, dinámica y moderna.
Junto al turismo cultural, la diversidad de opciones para el turista se manifiesta en una amplia red de instalaciones para la celebración de congresos y convenciones, que hacen de la capital de España uno de los centros de reunión y negocio más importantes de Europa.
Un complemento ideal a la hora de visitar Madrid es disfrutar de su gastronomía, ir de compras, divertirse en uno de sus parques temáticos, jugar al golf o practicar otros deportes, recorrer sus municipios y vivir siempre una experiencia inolvidable, en una Comunidad abierta y hospitalaria.
Todo un mundo por descubrir, en una región de fácil acceso, situada en el centro de la Península Ibérica, con una excelente red de infraestructuras y comunicaciones, que convierten a Madrid en un destino obligado para conocer la cultura española.
La Comunidad de Madrid hace siempre un guiño de complicidad a todo visitante, que le hace sentirse como en casa. Llena de innumerables propuestas, demuestra enseguida su irrefrenable vena artística, y le enseña sus museos y sus monumentos, mudos testigos de la historia, llevándole de viaje por siglos de cultura. En ella se conjugan todas las tendencias, y se pasa, sin solución de continuidad, de los edificios más modernos a otros con cientos de años de historia.
La Comunidad de Madrid dispone de amplias superficies cuya flora, fauna y paisajes poseen un enorme valor por su rareza, calidad o fragilidad: los Parques Regionales de la Cuenca Alta del Manzanares, el del Sureste, el del Curso Medio del Río Guadarrama y su entorno, y el Parque Natural de Peñalara. Pasear por sus sendas, especialmente diseñadas, en espacios naturales únicos, es un privilegio del que merece la pena gozar.
Sus posibilidades de ocio, restaurantes, cines, teatros, resultan innumerables, tanto en la capital como en todos los municipios. Este contraste es fiel reflejo de la enorme y variada oferta turística de la Comunidad de Madrid.
Cosmopolita y elegante, tradicional e innovadora, actual y vanguardista, invita a disfrutar una de las mejores y más variadas gastronomías del mundo. Pero siempre, esté donde estés, encontrarás una mirada amiga para acompañar tu viaje.
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Turismo rural, un itinerario diferente
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Los amantes de la naturaleza tienen también motivos para acercarse a la Comunidad de Madrid. Las diferentes rutas y excursiones son el medio perfecto para conocer su entorno. Distintas sendas recorren el paisaje madrileño y dan la oportunidad al viajero de descubrir de primera mano parajes como la famosa cueva de El Reguerillo, en la ruta por el Pontón de la Oliva; la mayor cascada natural de la Comunidad, en el sendero de la Cascada del Purgatorio; o el Camino de Schmid, que une Navacerrada y Cercedilla, enclaves significativos de la Sierra de Guadarrama, futuro Parque Nacional y mejor representación de la montaña interior peninsular en España. Debido a la gran variedad de la oferta turística de la Comunidad de Madrid, existen diferentes rutas preestablecidas por las que el viajero puede descubrir la región según sus preferencias. Arte, cultura, compras, deporte, o gastronomía son algunas de las posibilidades que ofrecen estos itinerarios. La Ruta del Alfoz hace referencia al vocablo medieval alfoz, que significa “distrito o término rural de una ciudad que dependía de las autoridades municipales de la misma”. Este itinerario comienza en Alcobendas y rodea Madrid siguiendo el sentido de las agujas del reloj hasta cerrar el círculo en Las Rozas. La Ruta del Mudéjar que recorre los pueblos ubicados en el este de la Comunidad de Madrid; localidades que han sabido conservar algunas de las muestras más relevantes del estilo mudéjar, estética que se desarrolla desde finales del siglo XII hasta principios del XVI en los territorios cristianos, empleando formas y técnicas expresivas propias de la cultura árabe. La Ruta de las Vegas muestra las tierras regadas por el río Tajuña en su descenso desde Ambite hasta su confluencia con el río Jarama. De este modo, desde Titulcia se puede bajar por la ribera del Jarama hasta llegar a Aranjuez. A partir del Real Sitio de Aranjuez se continúa remontando el río Tajo hasta el punto en el que éste hace su entrada en nuestra región. Humedades, acantilados yesíferos y reservas naturales acompañan a las localidades regadas por estos tres ríos del sureste de la Comunidad. Rutas históricas, naturales, gastronómicas cientos de lugares por descubrir en un solo destino.