En los inicios de la Santa Misa, se realizó una pormenorizada remembranza de la fuerte influencia canaria en esta zona, perteneciente a la provincia de Villa Clara, donde se asentaron a lo largo del tiempo miles de emigrantes, que en lo fundamental se dedicaron al cultivo del tabaco, según informa desde Cuba Raúl Martell.
Estos honrados y trabajadores hijos de Canarias no sólo aportaron a Vueltas su sacrificio y sudor, sino que también enriquecieron la espiritualidad del poblado con sus costumbres y tradiciones, que alcanzaron su mayor esplendor hace más de un siglo con la proclamación de la Virgen de la Candelaria como patrona de esta pequeña villa.
Finalizada la Santa Misa, se realizó una organizada procesión, con una amplia presencia popular. Los residentes en Vueltas, además de la festividad de la Virgen de Candelaria, celebran cada 2 de febrero sus tradicionales Parrandas, que constituyen la más importante cita cultural del año.
Según los apuntes de destacados historiadores, en Vueltas se reportó una importante emigración canaria, especialmente a partir de 1883, cuando comienza el arribo a la zona de cientos de familias isleñas.