Las dos propuestas de PSOE e Izquierda Plural abogan por la eliminación del voto rogado así como la creación de una circunscripción en el exterior. También que se impulsen todas aquellas actuaciones que garanticen el voto en urna en el extranjero.
Además, el grupo de izquierda defiende que se les devuelva a los ciudadanos españoles residentes en el extranjero el derecho al voto en las elecciones municipales y que se regulen las campañas electorales en el exterior.
Asimismo, el PSOE insta al Gobierno a “realizar cuantas actuaciones sean necesarias para favorecer la posibilidad del voto electrónico, tanto las relacionadas con el punto de vista de técnico en los soportes de la Administración electrónica y DNI que garanticen la plena accesibilidad y seguridad, como desde el punto de vista jurídico, planteando las necesidades de reforma normativa que requerirían su efectiva implantación”.
Estas dos proposiciones no de ley fueron publicadas en el diario oficial del Congreso de los Diputados en mayo de 2012 y se debatirán en la Comisión Constitucional casi año y medio después.
Por su parte, Unión Progreso y Democracia (UPyD) considera que la actual normativa que regula el voto exterior discrimina a los ciudadanos españoles residentes en el extranjero respecto a los residentes en España en el ejercicio del derecho al voto sobre todo en lo relativo a los plazos que dificultan sobremanera dicho ejercicio.
La propuesta de UPyD es más genérica que las otras dos y pide “establecer un procedimiento para el ejercicio del voto de los españoles residentes en el extranjero que no sea discriminatorio y que sirva para promover el ejercicio de este derecho fundamental por este colectivo que representó el 4,15% del censo electoral total en las elecciones generales de 2011”.