La colectividad residente en Buenos Aires le brindó una cálida bienvenida a Román Oyarzun, nuevo embajador de España en Argentina

En su intervención destacó la necesidad de integrar a los jóvenes en las entidades

Oyarzun, primero por la derecha, se mostró sonriente al llegar al Club Español.

Asistieron al evento, convocado por la Federación de Sociedades Españolas de la República Argentina, el cónsul general de España en Buenos Aires, Pablo Barrios, los cónsules adjuntos Ricardo Santos y Marcos Rodríguez, y los más importantes directivos de las entidades de la colectividad, además del viceministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Lemus, quien acudió en representación del Gobierno porteño.

La apertura del acto estuvo a cargo del presidente del Club Español, José Benito López Carballedo, quien manifestó su orgullo por ser anfitrión del agasajo de bienvenida al nuevo embajador, que asume el cargo que hasta hace pocos meses ocupó Rafael Estrella Pedrola.

“Las autoridades del Club Español, que este año celebra su 160° aniversario, y de la Federación de Sociedades Españolas, entidad que en octubre próximo cumple medio siglo de vida, estamos muy orgullosos de recibir hoy a un querido amigo como lo es Don Román Oyarzun, a quien le damos la más afectuosa de las bienvenidas”, señaló López Carballedo.

A continuación tomó la palabra el presidente de la Federación de Sociedades Españolas, Pedro Bello, quien le deseó al homenajeado “la más profunda de las suertes en la labor que llevará adelante al frente de la Embajada. Esta Federación, y toda la colectividad española, se pone a su entera disposición para que su labor sea exitosa”.

Nacido en Madrid en 1957 y padre de tres hijos, Oyarzun es Licenciado en Derecho y tiene una larga carrera diplomática que inició en 1985 y lo llevó a ejercer, entre otros cargos, como ministro consejero de la representación permanente de España ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la segunda jefatura de las embajadas españolas asentadas en Damasco y Montevideo, cargo que también ya desempeñó en Buenos Aires a comienzos del nuevo milenio, por lo que ya es un viejo conocido de muchos de los directivos que acudieron al agasajo.

“La verdad es que estoy abrumado por encontrarme con toda esta muestra de calidez y afecto, ya que es algo que uno no experimenta muy a menudo. Les aseguro que tienen en mi persona a un embajador que estará permanentemente al servicio de ustedes, porque esa será una de las facetas más reconfortantes de mi trabajo”, subrayó a su vez Oyarzun luego de los efusivos aplausos con los que fue recibido.

En la misma línea, añadió: “Yo vengo de un mundo bastante extraño, que es el de las salas de reuniones de la ONU en donde uno se pasa horas y horas debatiendo sobre los problemas del mundo, pero les aseguro que este cambio radical en mi vida profesional es probablemente la faceta más reconfortante en este nuevo destino, ya que me brinda el privilegio y la oportunidad de entrar en contacto con las queridas personas que integran la colectividad española de Argentina”.

Durante su intervención, calificó a la comunidad española residente en el país austral como la más importante fuera de España, “tanto por su número como por su calidad, porque los emigrantes que eligieron esta tierra han jugado un papel absolutamente fundamental en el desarrollo de la sociedad y la cultura argentina, además de ser uno de los pilares más importantes en las relaciones entre ambos países, por lo que aprovecho para agradecerles el maravilloso papel que han desempeñado a lo largo de los años y que aún siguen desempeñando”.

Integrar a las nuevas generaciones

Uno de los aspectos más relevantes que expresó Oyarzun durante su discurso fue el de resaltar la necesidad de acoger en las entidades a las nuevas generaciones de españoles. “Tenemos que aprovechar la oportunidad que ha significado la Ley de Memoria Histórica, que va a permitir la incorporación de aproximadamente cien mil nuevos nacionales españoles a la colectividad. En varias ocasiones ya he hablado con Pedro Bello y con los representantes de las instituciones de que tenemos que darle una gran entrada a los jóvenes, porque son el futuro de la colectividad y pueden jugar un papel absolutamente fundamental para mantener vivas las tradiciones españolas en Argentina”.

En el mismo sentido, manifestó su alegría por la nutrida representación de jóvenes presentes y los instó a participar en las instituciones y en todas las actividades de la colectividad “ya que así se asegurará la continuidad de nuestros lazos con este país”.

Por último, recalcó el “maravilloso esfuerzo” que en los últimos años ha desarrollado la Federación de Sociedades Españolas para acoger en su seno a la mayor cantidad posible de entidades asentadas a lo largo y ancho del territorio argentino, y concluyó: “Ese es el camino adecuado a seguir, porque redundará en un mayor beneficio para toda la colectividad al brindarles a sus integrantes un espacio de educación, recreo y cultura”.