La colectividad en Londres se moviliza y envía un escrito a los Padres Paúles para que no cierren la Capellanía Española

El cónsul general, José Ignacio Carbajal, también ha remitido una carta a la Orden Vicenciana en Salamanca para que la mantenga “por la meritoria labor que viene desarrollando en el auxilio a personas necesitadas”

La Orden Vicenciana, fundada por San Vicente de Paúl y conocida popularmente como Padres Paúles, está contemplando la posibilidad de cerrar la Capellanía Española de Londres, ubicada en el número 47 de Palace Court, en el famoso barrio de Notting Hill. Esta Capellanía, creada en 1963 para atender a la emigración española, ha ofrecido un servicio a la colonia que el propio cónsul general de España en la capital británica, José Ignacio Carbajal, ha calificado como una “muy valiosa y meritoria labor”.

La noticia se dio a conocer cuando hace pocos días el padre Benito Fraile, tras 31 años de servicio en la Capellanía, dejaba Londres y volvía a España y el rector de la Capellanía, el gallego Ernesto Atanes, tenía que explicar la situación a los feligreses. Fue entonces cuando la colectividad comenzó a movilizarse y la primera acción fue escribir una carta al visitador de la Orden Vicenciana de la provincia de Salamanca, Eblerino Díez Llamazares (de quien depende este centro social/religioso), solicitándole que replantease su decisión de cerrar la Capellanía. Por ahora, más de 120 personas han firmado la misiva aunque se espera que en los próximos días lo hagan miles de familias españolas residentes en Londres y su área de influencia.

Los firmantes señalan que las puertas de la Capellanía siempre han estado abiertas a todo el mundo y en especial a los emigrantes españoles más necesitados. Incluso quien acude al Consulado o la Embajada es remitido allí porque “fuera quien fuese se le acoge con cariño y nunca le falta desde una ducha a un plato de comida caliente y lecho donde descansar”.

También recuerdan la puesta en marcha de la Capellanía y el trabajo duro realizado entonces por el grupo de Paúles con la ayuda de miembros de la colectividad española. “Fueron años duros pero a pesar de todas las dificultades una bonita experiencia ya que luchamos juntos con el fin de que en nuestra Capellanía encontráramos lo que realmente necesitábamos: sentirnos en casa”.

Al mismo tiempo, el cónsul general de España en Londres, José Ignacio Carbajal, se sumó a las peticiones de la colectividad y envió otra carta a Eblerino Díez en la que le conminaba también a que se replantease la decisión de cerrar la Capellanía.

Subraya Carbajal en la carta “el gran papel que ha desempeñado la Capellanía a lo largo de muchos años, en ayuda y asistencia de las personas más necesitadas de nuestra comunidad y de otros muchos españoles de tránsito por Londres. Me consta además, que esta labor no se limitaba a personas de nacionalidad española sino otras muchas nacionalidades, que han tenido en la Capellanía uno de sus refugios más admirables”. Asimismo indica que “es de justicia reconocer esta muy valiosa y meritoria labor que la Capellanía, bajo sus diferentes rectores, ha venido desarrollando en auxilio de las personas más necesitadas de nuestra comunidad”.

“Precisamente por esta razón -continúa el cónsul- y en reconocimiento de esta labor de asistencia, el Consulado General ha venido gestionando a favor de la Capellanía, una pequeña subvención anual por la asistencia prestada a nuestros nacionales, siempre que se ha solicitado”. La cuantía de la ayuda en 2010 fue de 6.000 euros, según aparece publicado en el BOE de 20 de septiembre de este año.

La Capellanía Española de Londres, además de atender las necesidades espirituales de los españoles que llegaban a la capital británica, muchas veces en precarias condiciones, forma parte de la vida familiar de los emigrantes pues allí se han celebrado miles de bautizos, primeras comuniones y bodas de la colectividad. Además, por su gran labor social de atención a los más necesitados se ha ganado el cariño y el respeto de buena parte de los 50.000 españoles que viven y trabajan en esta demarcación consular.