Como punto final del viaje que realizaron a Argentina, el director general d’Acció Exterior de las Islas Baleares, Jordi Bayona, y la gerente de la Fundació Balears a l’Exterior, Pepi González, compartieron el pasado jueves 16 de diciembre un almuerzo con los beneficiarios de los programas de ayudas individuales, asistencia domiciliaria y medicamentos a coste cero que el Govern destina a los emigrantes más necesitados, compartiendo junto a ellos una jornada muy emotiva por las efusivas muestras de cariño y agradecimiento que recibieron por parte de la colectividad residente en Buenos Aires.
Al encuentro asistieron los receptores de los tres programas dirigidos a los emigrantes baleares residentes en el país austral en situación de necesidad, mediante los cuales reciben ayudas económicas individuales, medicamentos a coste cero y asistencia personal a domicilio. Sobre estos dos últimos programas, que se pusieron en marcha por primera vez en el año que está culminando (a diferencia de las ayudas individuales, programa que ya tiene varios años de rodaje), Bayona explicó a Baleares Exterior: “Al ser nuevas iniciativas, queríamos comprobar in situ su funcionamiento y recabar las opiniones de los beneficiarios”.
En ese sentido, destacó que la recepción de estos programas ha sido ampliamente positiva. “Me he llevado una grata sorpresa, porque ha habido momentos de gran emoción al hablar con nuestros paisanos. En Bahía Blanca quedamos casi todos llorando por las manifestaciones de agradecimiento ya que son programas muy necesarios para los baleares que son pensionistas o jubilados. Hay que ser agradecidos con la gente mayor, y esa es la voluntad del Govern”, subrayó.
El Servicio de Asistencia Domiciliaria (SAD) consiste en la visita diaria de un monitor a personas mayores que viven solas y que, debido a su edad, pueden encontrar dificultades en la realización de tareas cotidianas como solicitar turnos al médico, el pago de las cuentas de su hogar o la gestión de trámites.
“De los estudios preliminares que realizamos sonsacamos que había una enfermedad muy común en todas estas personas, que es la soledad. Es un programa que está muy desarrollado en las islas y en toda España y los usuarios están muy agradecidos porque les ha cambiado la vida, ya que todos los días reciben la visita de una joven que los ayuda a organizarse en sus tareas cotidianas”, explicó Bayona sobre este programa que también se desarrolla en Uruguay y Chile y que en Argentina cuenta con 190 beneficiarios que son visitados por 44 monitores.
Respecto al programa de Medicamentos a Coste Cero, mediante el cual el Govern balear reembolsa a 388 emigrantes residentes en el país austral la diferencia que deben pagar al adquirir sus medicamentos sobre el total que no es cubierto por sus seguros de jubilación u obras sociales, señaló: “Estamos hablando de una franja de personas mayores de 65 años que tienen enfermedades crónicas y que deben tomar determinados medicamentos por el resto de sus vidas; es un programa que ha hecho mucho impacto, porque de los estudios preliminares sabíamos que los montos de las jubilaciones en Argentina son muy inferiores en comparación con los de España, mientras que aquí el precio de los medicamentos son iguales o más altos que en nuestro país, por lo que en gran parte de los casos la adquisición de los medicamentos representaba más de la mitad de sus ingresos por jubilación”.
A estos dos programas, que cuentan en total con 578 usuarios, deben sumarse los 653 emigrantes que reciben las ayudas económicas individuales, dando por resultado que más de 1100 baleares residentes en Argentina reciben asistencia por parte del Govern (cabe aclarar que los programas son complementarios y no excluyentes, por lo que los beneficiarios pueden solicitar más de un programa). “A principios de nuestra legislatura, en 2007, habían 164 perceptores de ayudas individuales”, aclaró Bayona, subrayando así la preocupación y el compromiso que el Gobierno que preside Francesc Antich está demostrando por sus ciudadanos residentes en el exterior.
Luego del almuerzo, del que también participó la responsable de la gestión de los programas sociales en Buenos Aires, Bárbara Más Olivares, el director general d’Acció Exterior se refirió a las dificultades económicas que está viviendo España y que llevaron a que los presupuestos de muchas entidades oficiales hayan sufrido recortes. “Baleares no podía ser una excepción, pero cuando uno gobierna en tiempos de crisis lo que debe hacer es una lista de sus prioridades, y las ayudas sociales a nuestros emigrantes se van a mantener porque ese es el compromiso del Govern”, recalcó.
Por último, y luego de transmitir a todos los presentes “un gran abrazo” de parte de Antich, Bayona envió un mensaje a la colectividad residente en Argentina: “Aunque estemos a 14 mil kilómetros de distancia, siempre los llevaremos en el corazón porque ustedes han conseguido mantener las tradiciones y la cultura de nuestras islas a lo largo de los años y son los dignos descendientes de aquellos emigrantes que fundaron hace más de cien años las primeras entidades baleares en el exterior”.
La Casa Balear de Buenos Aires
Bayona también se refirió al conflicto interno que aqueja a la Casa Balear de Buenos Aires y que provocó que las ayudas sociales destinadas a los emigrantes residentes en la capital argentina y en su zona de influencia tuvieran que gestionarse en la sede del Centro Asturiano. “Lo que ha hecho el Govern fue tomar cartas inmediatas en este asunto hasta que se resuelvan los problemas organizativos internos de esta entidad y hacerse cargo directamente de la distribución de las ayudas”, aclaró.
En la misma tónica, explicó que durante su estancia en la capital argentina mantuvo una reunión con los directivos de la institución “en la que les he transmitido que desde nuestro punto de vista no era tolerable que el resto de las casas brindaran este servicio pero que no pudieran acceder al mismo los baleares de Buenos Aires; también les dije que hace falta generosidad para resolver esta cuestión, pensar en los socios y que todos cedan un poco porque las posiciones maximalistas no llevan a ninguna parte”, y añadió: “Yo estoy muy confiado en que este conflicto se solucionará una vez que las heridas cicatricen, y me ha parecido entender que así será”.