La Asociación Islas Canarias de Maldonado organizó diversos actos por el Día de las Islas

También organizó una fiesta con motivo de la tradicional la noche de San Juan

No faltaron las curanderas y la bruja en la fiesta de la noche de San Juan.
Bailando alrededor de la hoguera en la noche de San Juan.
Cantando los himnos antes de empezar el acto de recuerdo de José Artigas.
La celebración congregó a mucha gente.

Continuando con el desarrollo de la programación en el marco de los festejos del Día de Canarias se organizaron dos actividades el pasado mes de junio.
El día 19 de junio se recordó en un emotivo acto el natalicio de José Artigas, héroe nacional de Uruguay, nieto de una lagunera, María Rodríguez y sobrino de Josefa Luis, también lagunera. Ambas vinieron con los canarios que fundaron Montevideo y Josefa Luis, que fue la primer mujer en venir a vivir a la región de Maldonado, junto a su esposo que fue designado a un destacamento de vigilancia y con el que tuvo siete hijos.
El acto se inició con la ejecución de los tres himnos, de Uruguay, España y Canarias, y a continuación la presidenta, Ivonne Montañés, hizo referencia a los ascendientes españoles, peninsulares y canarios, que conformaron la personalidad de José Artigas.
Se proyectó en vídeo una actuación del coro y del grupo de danzas de la institución, interpretando la milonga del compositor canario Elfidio Alonso, titulada ‘El éxodo’ y que hace referencia a la incorporación de los canarios a la lucha independentista oriental y traza un paralelismo con otros héroes de América y Europa.
El espectáculo fue abierto a todo el público y gratuito, pudiendo además participar de un almuerzo a beneficio de la Institución.
El 23 de junio los socios participaron de la celebración de la Noche de San Juan, disfrutando de cantos alusivos, bailando alrededor de la hoguera, quemando en ella los malos ratos. No faltó la presencia de una bruja montada en una escoba que provocó la risa de todos los presentes y la de dos curanderas que con sus yuyos, amuletos y santiguados pretendían curar todos los males.
Las clásicas cédulas fueron sustituidas por coplas contestadas dichas por los participantes con mucha gracia.
A la entrada de la sede social y para que el sereno de esa noche tan especial hiciera lo suyo, se había colocado un lebrijo con agua y pétalos de rosa para ayudar a las mujeres a mantener su lozanía. No faltó la costumbre lanzaroteña de los doce montoncitos de sal para cada mes del año, esperando saber cuál de ellos sería lluvioso.
Una pitonisa tiró las cartas y los buzios, trayendo mensajes para la salud “con leche de cabra y torrijas, mejora tu vida en fija”; “adelante y no es pavada…dale a la papa arrugada”, o “higo de tuna p´al que se aluna”.
El anunciado tendido de mantel promovió el aporte de alimentos que disfrutaron todos los presentes. El objetivo de los dos encuentros fue promover y difundir la cultura canaria, reconociendo en ella costumbres heredadas.