La Asociación Española de Salto entregó diverso material a cuatro escuelas rurales de este departamento uruguayo

La entidad lleva diez años realizando estas donaciones para los alumnos con menos recursos

La directora de la escuela 17 Marianela Pereira con directivos de la Asociación Española de Salto, Walter Muñoz su presidente Luis Avellanal y Ángel Lima.

Esta emblemática jornada se desarrolló en el marco del Día del Libro, y los directivos de la Asociación Española de Salto, presididos por Luis Avellanal, escogieron cuatro escuelas rurales del departamento norteño para llegar hasta allí a cubrir la necesidad de los centenares de escolares de escasos recursos que acuden a estos centros educativos.

Si bien Uruguay tiene la superficie similar a Galicia en su extensión, su relieve es suavemente ondulado y su atraso en infraestructuras para el agro, con caminos que cuando llueve se vuelven en muchos lugares intransitables, ha obligado a que aún sobrevivan escuelas rurales funcionando como en el siglo XIX, con una maestra que en muchos casos hace hasta de cocinera y que le dicta en una sola aula clase a alumnos de diferentes grados.

Importante pulmón para el rural

Sin embargo, estas escuelas constituyen un pulmón importante para el campo uruguayo, de donde se extrae la mayor riqueza económica del país, su ganado y cultivos, ya que de esta forma las familias de esos escolares y ellos mismos, no se alejan de la tierra, adquieren un cotidiano andar por las tareas rurales y hasta van tomando el gusto de continuar los trabajos de sus padres en lugar de emigrar a la ciudad.

La realidad de los maestros a veces suele ser distinta a la de sus alumnos ya que ellos sí viajan diariamente a sus lugares de origen, que suelen estar en las ciudades de Salto o Artigas, aunque algunos quedan aún que permanecen en las escuelas, las cuales suelen contar con una vivienda donde muchas veces es necesario alojar a los escolares que viven más lejos y por inclemencias del tiempo no se pueden ir a sus casas.

Los niños llegan en bicicleta o a caballo, aunque son muy pocos los que son traídos por algunos de sus padres, ya que éstos son asalariados rurales y muy temprano ya están en el campo lejos de su familia.

De esta forma la comida del mediodía en la escuela se transforma en la más importante para estos pequeños, según expresó el maestro Carlos Palladino, director de la escuela 19 de Colonia Lavalleja, una de las visitadas por los directivos de la Asociación Española.

Banda militar

Las otras escuelas visitadas fueron la 17 de Pueblo Lluveras, la 18 de Lavalleja y la 106 de Pueblo Ferreira. En todas ellas los representantes de la Asociación Española fueron acompañados por la banda militar del batallón de Infantería 3 que está dirigida por el capitán Braulio González quienes le pusieron sonido al color de los niños vestidos con sus túnicas blancas y sus moñas azules quienes, además, presenciaron el despliegue del cuerpo de baile de danzas españolas dirigido por Marcela Cavallo.

La Asociación Española de Salto tiene 145 años de vida y según expresó su presidente, Luis Avellanal, hace “diez años que realizamos donaciones de libros, útiles escolares y ropa a las escuelas rurales del departamento”.

Asimismo destacó que desde 1987 la sede central de la Asociación, en la capital salteña, cuenta con la biblioteca Miguel de Cervantes, donde se recibieron donaciones del Ministerio de Cultura del Gobierno de España, de la propia Embajada española en Uruguay y de distintos gobiernos provinciales.

En esta ocasión se entregaron libros de cuentos, cuadernos, camperas polares, platos, cubiertos, vasos y otros elementos a utilizarse en el aula escolar. Finalmente Avellanal explicó que para ello se contó con la colaboración de varias empresas locales vinculadas a la colectividad española y de la Delegación de la Unión Europea en Montevideo.