-Nos podría explicar cuáles son los objetivos de la agrupación del Partido Popular de España en Puerto Rico.
-Nos fundamos en julio de 2011, y teníamos claro que nuestra misión sería servir como puente de unión entre España y Puerto Rico, por dónde transitaran todas las inquietudes, preocupaciones, opiniones, deseos, sueños, de todos los españoles, tanto personas físicas como jurídicas, que residimos aquí, sin distinción de ideología política, ni comunidad de origen. Y así ha sido. De hecho, puedo decir, que recibimos llamadas para hacernos consultas de cualquier tipo, y para hacernos saber de ideas que España pudiera implantar.
Además de lo anterior, un objetivo fundamental es hacer entender a nuestros ciudadanos la importancia de su voto y, en lo que a mí respecta, si es por el PP mejor.
-¿Qué iniciativas o actividades desarrollan?
-Después de dos años de fundados, ahora estamos entrando en otra etapa de nuestro desarrollo, consolidar nuestra posición como partido político y que nuestros compatriotas nos vean, independientemente de ideologías, como aliados, como amigos comprometidos en su bienestar.
En Puerto Rico estamos inscritos cerca de 6.000 votantes y apenas votaron el 5% en la última elección general. Como usted comprenderá, tenemos el deber de facilitar que ese porcentaje suba dramáticamente. Queremos hacer consciente al ciudadano español del valor de su voto y es ahí, en donde tenemos el gran reto: movilizar a la gente para que vote.
Ahora mismo, le pongo como ejemplo, estamos llevando a cabo una campaña para que nuestros ciudadanos sepan la importancia de la Unión Europea, sus instituciones y, fundamentalmente, el Parlamento. Queremos que voten en las elecciones europeas del 2014, que elijamos a quienes mejor pueden defender nuestros intereses, queremos darle fuerza a nuestro voto.
-¿Considera que es necesaria una mayor participación de los españoles que residen en el extranjero en la vida social y política de su tierra de origen? Si es así, ¿de qué manera se podrían articular los cauces adecuados para ello o considera que ya existen esos cauces?
-Vivir en el exterior nos da otra perspectiva acerca de España. Aún reconociendo la importancia del terruño de cada cual, desde la distancia se piensa en España como un todo homogéneo. Aquí nos juntamos ciudadanos de diferentes procedencias y apenas lo notamos, todos somos andaluces cuando se festeja la Virgen del Rocío, o catalanes cuando la Diada, o valencianos cuando las Fallas, o madrileños en San Isidro, etc. Y ello es así porque nos une lo esencial, no nos separan las diferencias. Con ello quiero decir que, en términos generales, el español del exterior está más interesado en participar en la elecciones generales que en la regionales.
-¿Qué opina sobre la actual regulación del voto exterior? ¿Cree que es beneficiosa para los españoles que viven fuera de España?
-Que los españoles que residimos en el exterior voten es extremadamente importante, beneficioso para el conjunto de España y uno de nuestros objetivos fundamentales. Sin embargo, debo decirle que en las últimas elecciones yo no he podido votar, siempre me han llegado las papeletas fuera del tiempo reglamentario. Y como yo, hay muchos. Ello hace que se pierda el interés y es frustrante. Por otro lado, no es eficiente el procedimiento actual de solicitar e inscribirse para votar. No digo que no sea importante, sino que algo falla. No es eficiente y a la gente no se le debe poner tantos obstáculos para ejercer sus derechos.
-¿Apoyaría la creación de una circunscripción electoral para los españoles residentes en el extranjero y que contasen con senadores o diputados, o ambos, propios?
-En agosto de 2011 se me encomendó la tarea de escribir la plataforma de nuestro partido en Puerto Rico. Después de discutirla y hacerle algunas revisiones la enviamos a Génova para que la consideraran. En aquel entonces ya indicábamos lo siguiente:
Primero, establecer la figura del diputado o diputados representando al ciudadano español residente en el exterior, elegido por nosotros y en la misma proporcionalidad que significan 2 millones de personas de la comunidad española en el exterior. Ese legislador debería ser preferentemente alguien que residiera en el exterior, pues él o ella ha vivido y vive en carne propia lo que es ser emigrante. Y segundo, crear Juntas Consultivas Regionales de ciudadanos en el Exterior (América del Norte, América Central y El Caribe, Sudamérica, Europa, etc.), que no dependan de las embajadas ni consulados, cuya función sea ayudar a configurar la política pública (incluyendo la política económica) en sus áreas de influencia.
-¿Cuál es la situación de la colectividad española en Puerto Rico? ¿Cuáles son sus inquietudes o sus necesidades?
-Es difícil dimensionar la colectividad española en Puerto Rico. Aquí habitamos algo menos de cuatro millones de personas y, en un alto porcentaje, sus bisabuelos o abuelos eran o son españoles y, aunque no tengan pasaporte español, se consideran españoles. Sin embargo censados hay algo más de seis mil ciudadanos españoles y, en términos generales, podemos decir que aquí no pasan penurias económicas, pero, como es natural, se añora la tierra de uno. Hay asociaciones de gallegos, asturianos, andaluces, etc., que se reúnen regularmente y hacen sus actividades. Debo decir que poder ver TVE y Antena 3 es una bendición y aunque podamos no estar de acuerdo con su programación, lo cierto es que vivimos España con más intensidad que los que viven en el territorio nacional.
Por supuesto, hay inquietudes y muchas que seguramente son iguales o parecidas a las de los ciudadanos residentes en otros países. En estos momentos es motivo de gran consternación el hecho de que ya no tenemos vuelos directos a España. Iberia canceló ese servicio y nos obliga a viajar vía Miami o New York, y créame, es un palizón. Hay inquietudes con la ley de herencias. Por ejemplo: yo pago más impuestos por lo que heredé de mis padres que mi hermana, que reside en Valencia. Y así podría enumerar un sinfín de inquietudes.
-En España se habla mucho de la necesidad de la internacionalización de las empresas. En este sentido, ¿qué ofrece un país como Puerto Rico? ¿Es una tierra de oportunidades? ¿Qué consejos podría dar usted a quienes se estén planteando dar este salto?
-Puerto Rico también ha vivido y está viviendo, con especial virulencia, los efectos de una crisis estructural. Sin embargo siempre ha sido un país atractivo para los inversionistas y emprendedores ya que el Gobierno ofrece muchos incentivos fiscales y de otro tipo. Además, Puerto Rico tiene dos grandes ventajas: el idioma, porque aquí se habla español; y la segunda gran ventaja, por nuestra relación política con Estados Unidos, es que es una puerta de entrada automática al gran mercado norteamericano. La industria del turismo, la industria de la eficiencia energética, la industria de la salud, la industria de la transportación vial, entre otras, ofrecen grandes oportunidades en este momento.