“La puerta al Real Madrid está cerrada porque yo tengo un contrato, después si el Milan quiere venderme y el Real hace una oferta tendrán que tratarlo entre los dos equipos”, dijo el futbolista durante la primera rueda de prensa de la temporada. El jugador aseguró que el hecho de que el Real Madrid le siga, “es normal, también el Milán busca jugadores en otros equipos”.
Kaká reconoció que hubo un encuentro con el equipo merengue, aunque matizó que “el primero en saberlo fue el Milan”. El brasileño manifestó que el Real Madrid “es un gran equipo”, pero recordó las palabras de su compatriota Pelé, que le dijo que el dinero “no lo es todo” y señaló que aprendió de amigos que “se alejaron del Milán y ahora están sufriendo”.
Tras un largo silencio, el delantero aclaró su situación: “Nunca he reivindicado nada al Milan, nunca he pedido irme, ni rehacer el contrato o tener una cláusula rescisoria”.
El delantero también subrayó que quiere convertirse “en el símbolo de un gran equipo” y que espera que “éste sea el Milan”, por lo que ratificó su voluntad de continuar vistiendo la camiseta rojinegra.
Al jugador le preguntaron si le gustaría permanecer para siempre en el Milan a lo que respondió: “Espero escribir la historia de este equipo, pero ciertas expresiones pueden venirse en contra de mí, porque en el fútbol nunca se sabe lo que puede pasar”.