Juanjo Cobo se reconcilia con el ciclismo al ganar la Vuelta a España

El corredor del equipo Geox estuvo a punto de abandonar el deporte en el mes de mayo

El Príncipe Don Felipe levanta el brazo de Juanjo Cobo.

El español Juan José Cobo (Geox) levantó los brazos en Cibeles como vencedor de la 66 edición de la Vuelta a España, una vez finalizada la vigésima primera y última etapa, de 95,6 kilómetros entre el Circuito del Jarama y Madrid, en la que el eslovaco Peter Sagan (Liquigas) consiguió su tercer triunfo parcial.
Las matemáticas le dieron, por fin, la razón al “Bisonte de La Pesa”, que se consagró a los 30 años en una profesión que a punto estuvo de dejar el pasado mes de mayo por culpa de una depresión. No se fiaba de los 13 segundos que le separaban del británico Christopher Froome, pero el Sky no presentó batalla por las bonificaciones, sacó la bandera blanca y se conformó con colocar a su corredor revelación y a Bradley Wiggins en el segundo y tercer escalones del podio.
Hay sueños increíbles, por eso el Bisonte no se creyó que era el ganador de la Vuelta hasta que atravesó la pancarta de meta. Cuando despertó ya había alcanzado “un sueño impensable, lo máximo”, escena que se materializó en el podio, cuando el Príncipe Don Felipe de Borbón le entregó el trofeo de las espirales rojas al rey de la Vuelta.
Triunfo labrado metro a metro por el conquistador del Angliru, uno de los gregarios que, junto a Froome, han revolucionado la Vuelta 2011. El corredor de Cabezón de la Sal llegó a Benidorm al servicio de Menchov y Sastre y salió de Madrid por la puerta grande como ganador de su primera gran carrera por etapas, con la “compensación a los malos momentos vividos” y convencido de que, en forma, puede “competir al máximo nivel”.