Se marchó acompañado del preparador físico Marcos Álvarez.
El técnico evitó comparecer ante los medios de comunicación y se limitó a ofrecer un comunicado de despedida en la que se refería a una “oferta irrechazable que sería imperdonable no aceptar”. También aseguró que comprende que habrá “mucha gente que se enojará”, y no entenderá su decisión. Precisamente, el presidente sevillista, José María del Nido reconoció que le pidió a Juande Ramos que siguiera hasta el 30 de junio. “Pese al grave daño causado, no voy a hablar más de Juande Ramos. Más adelante, ya hablaremos”, espetó el dirigente, quien ahora deberá acordar con el Tottenham la indemnización a cobrar, que podría estar cercana a los 500.000 euros, someterse al arbitraje de la UEFA o incluso llevar la marcha del técnico a los tribunales.