El principal acuerdo alcanzado en la reunión que mantuvieron el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y el secretario general del PSCYL, Óscar López, consiste en la descripción de los criterios por los que se repartirán los 300 millones de euros anuales hasta 2012 correspondientes al Plan Plurianual de Convergencia Interior. Los criterios para determinar las zonas de intervención básica, intervención preferente e intervención de convergencia prioritaria, donde se destinarán los recursos, atenderán a ocho criterios demográficos, económicos y geográficos. Así, serán la menor evolución de la población entre 2000-2008, el menor porcentaje de jóvenes de 16 o menos años, el mayor índice de envejecimiento, el menor porcentaje de afiliados a la seguridad social, menor porcentaje de afiliados al régimen especial agrario, mayor porcentaje de parados, mayor dispersión de la población y mayor tiempo de desplazamiento al municipio de más de 30.000 habitantes más próximo.
Una vez aprobado el plan se aplicarán tres tipos de programas, según detalló el consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, al término de la reunión entre Herrera y López, que se prolongó durante una hora y media. Así, se agilizarán las infraestructuras y servicios públicos, se marcará una discriminación positiva de las ayudas públicas y se realizarán programas experimentales para la eliminación de los desequilibrios.
Presupuestos
El líder de la oposición autonómica socialista, Óscar López, presentó en su segunda reunión con el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, un decálogo para llegar a un acuerdo sobre las cuentas generales de la Comunidad de 2010, en el que plantean más dinero para las políticas sociales y la inversión productiva y deuda pública para incrementar el presupuesto.
Herrera ofreció diálogo al PSCyL en el momento en que se elaboran las cuentas para el próximo ejercicio y López le entregó su propuesta, que calificó de “seria y rigurosa” tras su segunda reunión con el presidente de la Junta.
Entre las propuestas figuran la austeridad en el gasto corriente, con la posibilidad de eliminar consejerías; el aumento de los fondos para educación, sanidad y servicios sociales; el incremento de la inversión real con un mínimo en todas las consejerías; favorecer el cambio de modelo productivo; apoyo a los ayuntamientos; coordinación presupuestaria con el Gobierno; mayor transparencia; mantenimiento de la estructura tributaria, y endeudamiento.
El dirigente socialista defendió que la Junta acuda a la deuda para aumentar los ingresos, pero declinó precisar si debe llegar al tope permitido por el Gobierno, que es el 2,5 por ciento del PIB.
En contraposición el consejero de Presidencia y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, recriminó a López que en esta propuesta falta la tabla de ingresos y no sólo proponer cómo se gasta. El descenso de la recaudación de impuestos, el recorte del 16% en las entregas a cuenta del Estado (1.000 millones de euros menos) y la falta de unas previsiones sobre el futuro escenario macroeconómico son, a juicio del consejero, grandes obstáculos para cuadrar las cuentas.