Estaràs valora que la nueva directiva europea de permiso único de residencia facilitará la inmigración legal

La eurodiputada añade que la norma satisfará las necesidades del mercado laboral

Rosa Estaràs.

La eurodiputada del Partido Popular de Illes Balears Rosa Estaràs ha señalado que la nueva directiva europea de permiso único de residencia y trabajo para Inmigrantes que fue aprobada en el transcurso del pleno del Parlamento Europeo facilitará los trámites administrativos para obtener los permisos de residencia y trabajo mediante un mismo procedimiento.

La directiva, que busca reducir los trámites administrativos y simplificar el procedimiento de admisión de los inmigrantes que quieren vivir y trabajar en un Estado miembro, complementará otras medidas de inmigración legal, como la tarjeta azul, y está diseñada para facilitar este tipo de inmigración al tiempo que satisface las necesidades del mercado laboral europeo.

De esta manera, los trabajadores extranjeros en situación regular disfrutarán de derechos equiparables a los de los ciudadanos europeos en cuanto al tiempo de trabajo, el salario, la seguridad laboral, el derecho de afiliación a un sindicato, el acceso a la seguridad social, las pensiones, la vivienda pública y los servicios ofrecidos por las oficinas de desempleo, aunque la decisión de admitir inmigrantes seguirá estando en manos de los Estados miembros.

Los trabajadores extranjeros podrán recibir sus pensiones cuando regresen a su país de origen en las mismas condiciones y con los mismos porcentajes que los nacionales del Estado miembro en el que hayan cotizado. Los inmigrantes regulares tendrán acceso a la seguridad social en las mismas condiciones que los ciudadanos del Estado miembro de acogida, aunque este derecho podrá restringirse en el caso de los trabajadores con contratos de menos de seis meses.

Los Estados miembros dispondrán de un plazo de dos años para transponer la directiva a sus legislaciones nacionales y podrán aplicar una serie de restricciones a estos derechos. Asimismo, tendrán un plazo de cuatro meses para aprobar o rechazar una solicitud de permiso único.

La eurodiputada considera que esta directiva “va a suponer una garantía en la igualdad de derechos entre los trabajadores y consolida de esta forma el objetivo que siempre tiene que marcar las actuaciones de la Unión Europea, que es asegurar a todos los ciudadanos europeos, independientemente de su procedencia, unas condiciones equitativas y una mejora sustancial de su calidad de vida”.

Las nuevas normas se aplicarán a los extranjeros que soliciten la residencia para trabajar en uno de los Estados miembros o que ya residan legalmente en la UE, pero los trabajadores desplazados estarán excluidos del permiso único, al igual que los residentes de larga duración y los refugiados, que ya están cubiertos por otra legislación comunitaria.

Tampoco se podrán acoger a la nueva directiva los temporeros y los empleados de multinacionales trasladados a una de las delegaciones de su empresa en la UE, ni los trabajadores autónomos, las au-pairs y los marineros que faenan en buques comunitarios.