El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, recibió el miércoles 24 de febrero en la sede del ministerio al jefe de Gobierno de Andorra, Jaume Bartumeu. El objeto de la reunión fue tratar la situación de los ciudadanos y ciudadanas de España que trabajan en Andorra o que viven y trabajan en este país teniendo nacionalidad española.
En total, se trata de unas 29.500 personas que o bien viven en La Seu d’Urgell y alrededores y se desplazan a Andorra cada día para trabajar allí, o bien viven en Andorra manteniendo la nacionalidad española (cabe recordar que la normativa de inmigración andorrana es muy restrictiva a la hora de conceder la nacionalidad de este país).
A estos ciudadanos españoles se les aplica la legislación laboral andorrana, y su cobertura sanitaria y la protección social por desempleo son también las propias de Andorra. En los tres casos, Andorra está aún alejada de los estándares internacionales y por ello Corbacho y Bartumeu han considerado conveniente la creación de una comisión mixta bilateral que analice la casuística de estas personas. La comisión estará integrada por representantes del Gobierno andorrano y del Ministerio de Trabajo e Inmigración.
La mejora de las condiciones laborales de los españoles que trabajan en el Principado de Andorra es una de las reivindicaciones tradicionales que realiza este colectivo a la Administración a través del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior.