Entregados en La Habana los Reconocimientos ‘Jovellanos’ correspondientes al año 2010

Mª Antonia Marcos Alonso y Benito Grandal Toraño obtuvieron el importante galardón “por la obra de la vida al servicio de la asturianía”

Regla Martínez entrega un ramo de Flores a MªA Marcos.
Grandal Toraño y su nieta junto al presidente del CRE.

La solemne velada de entrega de las distinciones ‘Jovellanos’ 2010 tuvo lugar el pasado 12 de enero en el salón de actos de la FAAC con la participación de más de ciento cincuenta invitados, entre los que se encontraban el consejero general de Emigración y presidente del CRE, Antonio Fidalgo Dopazo; el vicepresidente de la FAAC, Longinos Valdés Álvarez; el centenario emigrante asturiano, Constantino Díaz Luces, así como la totalidad de los presidentes y directivos de las 34 sociedades que integran la Federación Asturiana, presidentes de federaciones de sociedades, representantes de comunidades autónomas,  sociedades españolas, del Hospital ‘Salvador Allende’, (antigua Quinta Covadonga) e invitados en general.
El acto comenzó con la interpretación de los himnos nacionales de Cuba y de España. El maestro de ceremonias, Edel Morales, presentó al jurado, que estuvo integrado por Ricardo Barnet Freixas, como presidente y Ana Mª Suárez Ferrería como secretaria; Roberto Fernández Pérez, Manuel Pérez Suárez y Julio C. González Tirador como los vocales, todos delegados en propiedad de asociaciones asturianas. Como ya es tradicional en estos actos, María A. Álvarez Fernández, directiva del ‘Círculo Avilesino’, leyó la semblanza del sabio asturiano Baltasar Melchor Gaspar de Jovellanos y Jove, ilustre figura de la poligrafía española de los siglos XVIII y XIX, en conmemoración del 268º aniversario de su nacimiento.
La lectura del acta del jurado estuvo a cargo de su presidente, el cual tambien leyó la Resolución 3/10 de la junta de gobierno de la FAAC, por la cual se otorgó el preciado galardón correspondiente al año 2010 a María Antonia Marcos Alonso, presidenta de la FAAC, vicepresidenta de la sociedad ‘Unión Club de Allande’ y vicepresidenta 1ª del ‘Club Cangas de Onís Parres y Amieva’. “Emigrante asturiana destacada en un largo y fructífero desempeño en la atención y cuidado de sus coterráneos y su numerosa descendencia”. Asimismo, fue merecedor del importante ‘Reconocimiento’ Benito Grandal Toraño, presidente de la Sección de  Hacienda de la Sociedad Asturiana de Beneficencia (SAB), “infatigable trabajador y defensor de los intereses de la emigración asturiana y española en Cuba y sus generaciones posteriores”.
Enrique Valledor Lozano, presidente de ‘Unión Club de Allande’ dio lectura a la Biografía de Mª A. Marcos Alonso, y la entrega del diploma estuvo a cargo de Ana Mª Suárez Ferrería y Roberto Fernández Pérez. La biografía de Benito Grandal Toraño fue leida por Manuel Pérez Suárez, presidente de ‘Hijos del Partido Judicial de Llanes’, y el diploma lo entregaron Julio C. González Tirador y Suany Ramos, nieta del homenajeado. Regla Martínez, presidenta de la ‘Agrupación Castropol’ hizo entrega a María Antonia de un bello ramo de flores.
Mª A. Marcos Alonso pronunció con visibles muestras de emoción las palabras de agradecimiento, y al referirse al premio recibido lo calificó como “un alto honor” por tratarse de un ‘Reconocimiento’ que “durante más de 20 años ha puesto en justo y merecido relieve los méritos alcanzados por personas, grupos, e instituciones que de uno u otro modo han estado relacionados con la emigración asturiana a Cuba, su obra y su descendencia”. Al referirse a Benito Grandal Toraño, Marcos Alonso destacó que “ha sabido entregar lo mejor de su vida y su espíritu a favor de esa sufrida causa que es la de aquellos que un día dejaron atrás a la patria grande para encontrar, allende el océano, en otra nueva patria, un nuevo rumbo a su inciertas vidas”. Evocó en su discurso los lejanos días de su niñez como emigrante, tuvo palabras de  agradecimiento para Cuba, país de acogida donde “he tratado de pagar, aunque en una infinita fracción, la deuda que desde hace más de siete décadas contraje con esta maravillosa isla y su pueblo, que desde el primer momento fue tambien el mío”. Por último agradeció a todos los que hicieron posible que recibiera “tan elevado honor”.
En la actividad cultural destacaron la Banda de Gaitas de la FAAC, dirigida por Arturo Miguel Pérez Quintana, con la  interpretación de “Muñeira y Jota de Boal”. Asimismo, los jóvenes y talentosos valores del Teatro Lírico Nacional, Saeed Mohamed, (“Concierto de Aranjuez”), y Junior Luis, (romanza de “La Tabernera del Puerto”, de Sorózabal), para finalizar con un magistral duo de “Por ti volaré”. La ceremonia culminó con el himno asturiano, que fue entonado por todos los presentes, a los cuales fue ofrecido un brindis de despedida en honor de los homenajeados.

Breves notas biográficas

María Antonia Amelia Marcos Alonso. (Beceña-Cangas de Onís. 1930), emigró a Cuba a la edad de 5 años junto a un tío paterno. Siempre vivió en la capital del país, donde realizó estudios primarios, secundarios y universitarios que no pudo concluir al cerrarse la Universidad de La Habana en 1957. Durante 33 años se desempeñó en el sector del comercio, con importantes responsabilidades laborales y sindicales, por las que recibió distinciones y reconocimientos. Inscrita en el Centro Asturiano de La Habana y en la Quinta Covadonga (1935), a partir de 1948 se integró al ‘Club Cangas de Onís Parres y Amieva’. Es directora general de la Sociedad Asturiana de Beneficencia (2006). Formó parte de la Junta de Gobierno de la FAAC como Vocal (1999), vicepresidenta (2007) y actualmente presidenta (2010).
Por su parte, Benito Grandal Toraño nació en La Habana en 1933. Hijo de emigrantes. Madre asturiana de Piloña y padre gallego de La Coruña. Realizó diferentes estudios de radio-técnica, operador de plantas, trasmisiones de radio y TV, contabilidad, computación, idioma inglés, e ingeniería eléctrica. Trabajó durante 33 años en el Ministerio de la Industria Básica (MINBAS) hasta su jubilación en 1994. Desempeñándose también como acesor del Ministro de Economía, colaborador en la Dirección de Planificación, auditor y fundador del sistema de contabilidad para computadoras.
A partir de 1964 se integra en la Sociedad Asturiana de Beneficencia (SAB) y a partir de 1992 comienza su destacada labor en el cuidado y mantenimiento de su panteón social.