“Ha sido fantástico y estoy muy contento”, señaló Don Juan Carlos por creer que estos presidentes y la de Brasil asistirán a la Cumbre Iberoamericana de Cádiz. Respecto a las sensaciones que le han transmitido por la situación española y europea indicó que “están preocupados de que Europa tome medidas, de que cada país tenga que tomar las suyas. Pero están muy al lado nuestro y muy en plan de ayudar y de apoyarnos”. Y preguntado sobre si es optimista, respondió: “Yo siempre lo soy”.
El Rey visitó Brasil y Chile del 3 al 6 de junio en un viaje de marcado carácter comercial ya que Su Majestad viajó acompañado por importantes empresarios españoles que sirvió, entre otras cosas, para simplificar con Brasil y México la carta de invitación que hasta ahora se exigía a todo aquel que viniera al país de vacaciones y no fuera a un hotel, apaciguando el malestar existente por las férreas condiciones de entrada que España impone. Finalmente, no hubo encuentros con la colectividad española en ambos países.