El Partido Socialista aprobó en su 38º Congreso Federal, celebrado en Sevilla los días 3, 4 y 5 de febrero, una resolución por la que se propone “revisar la legislación electoral para facilitar el derecho de voto en el exterior y que desaparezca el voto rogado, así como la extensión del voto en urna”.
Además, continúa el texto refrendado por los militantes del PSOE, “también se propone crear en el Parlamento español una circunscripción específica de los españoles en el exterior”.
Esta resolución resulta ser una enmienda a la propia actuación del PSOE en la pasada legislatura, cuando defendió -junto al PP y otros grupos políticos- la vigente redacción de la Loreg que ha supuesto la reducción de la participación política de los españoles residentes en el extranjero a la mínima expresión.
Cabe recordar que fue el PSOE, y no el Gobierno de Zapatero, el que promovió la reforma de la normativa electoral que ahora parece que están dispuestos a cambiar.
Sin embargo, esta revisión, que había sido pedida por todas las agrupaciones socialistas en el exterior, no se contemplaba en el documento marco inicialmente presentado por la ejecutiva del PSOE.
Vieja aspiración
En cuanto a la creación de una circunscripción electoral específica para los españoles residentes en el exterior se trata de una propuesta que ya estaba contemplada en el programa electoral socialista, tanto en los comicios de 2008 como en los de 2011. Una vieja aspiración de la emigración que requiere una modificación de la Constitución, de ahí su dificultad. El PSOE vuelve a recoger este desafío en su 38º Congreso Federal.