El Partido Popular (PP), que había sido la fuerza más votada hace 3 años, vuelve a ocupar el segundo puesto en esta convocatoria -con 33 actas de diputado- tras perder más de medio millón de votos y un 4,46% de apoyos. Como tercer partido irrumpe en el Parlamento andaluz con gran vigor Podemos, al lograr 15 escaños. También se estrenará en la Cámara, Ciudadanos (C’s) que contará con 9 representantes. Todo ello a costa de Izquierda Unida Los Verdes-Convocatoria por Andalucía (IULV-CA) que pasa de 12 a 5 diputados.
El PSOE tendrá gobernar en minoría al quedarse muy lejos de los 55 escaños que dan la mayoría absoluta. Los partidos que podrían garantizar la gobernabilidad y aprobar las leyes con los socialistas en la Cámara serían PP, Podemos y C’s pero la candidata del PSOE rechazó durante la campaña electoral el apoyo de populares y Podemos, por lo que Ciudadanos se presenta como la opción más probable.
La suma de Izquierda Unida, socio de gobierno en la anterior legislatura, y Partido Socialista se queda en 52; por lo que no es suficiente para la mayoría. Además, las desavenencias entre ambos parecen ya insalvables.
Con todo, la amenaza al bipartidismo que registran la gran mayoría de las encuestas en España no se ha visto reflejada en esta ocasión en las urnas, puesto que PSOE y PP acaparan el 73% de los escaños del Parlamento andaluz. En parte, por los resultados de Podemos. Una formación a la que los sondeos daban más representación -por encima de la veintena de actas, en algunos casos- y que se presentaba como alternativa de gobierno pero que se ha quedado como principal fuerza de las minorías en la oposición.
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