Sin embargo, según los datos del Ministerio, no hay ningún beneficiario que viva en un país con igual o mayor renta per capita que España. Considera que es justo que la cuantía se adecúe a la situación de cada país y criticó la oposición del PP.
La secretaria de Políticas Migratorias del PSdeG-PSOE, Marisol Soneira, rechazó las críticas hechas por el Partido Popular de Galicia sobre el nuevo decreto de prestaciones publicado por el Gobierno central. Para Soneira, el PPdeG “está siguiendo el modelo Rajoy-Zaplana-Acebes para la política nacional, tratando de sembrar el temor entre el colectivo de emigrantes gallegos difundiendo interpretaciones sesgadas y llenas de mala intención con la única finalidad de tratar de conseguir intereses electorales”. “No es casualidad”, censuró la diputada socialista, “que este comunicado se haga público en vísperas del viaje del presidente de la Xunta de Galicia a Argentina y Uruguay”.
“El Partido Popular”, dijo Soneira, “está preocupado porque este Decreto equipara realmente a los ciudadanos españoles del exterior con los que, en igual situación, residen en territorio nacional. Así, un español perceptor de una pensión no contributiva de la Seguridad Social, recibe una pensión muy modesta pero tiene asegurada la asistencia sanitaria y las medicinas a través del Sistema Público. En esa línea ya se han firmado los convenios sanitarios con Argentina, se está cerrando un nuevo modelo para Venezuela y se está trabajando en otros países con presencia española”.
“La pensión no contributiva”, recordó la diputada del PSdeG-PSOE, “es en España de 301 euros, una cantidad muy modesta, máxime sí se tiene en cuenta que el salario mínimo interprofesional es incluso mayor, 513 euros, y sólo se conceden a las personas que carezcan de medios económicos suficientes y de patrimonio. Los criterios para fijar estas cantidades están basados en indicadores económicos y sociales de una sociedad muy concreta: España y Europa”.
Para Marisol Soneira, “el problema es que el PP utiliza la táctica del ‘todo bono’. Si no, aplaudiría este Decreto, ya que sus portavoces en materia de emigración conocen perfectamente que los indicadores que garantizan la justeza de la prestación son aquellos que tienen su base en el modelo económico y social del país en el que residen: para un ciudadano gallego residente en Cuba, la pensión no contributiva española es un gran salario, sin embargo este mismo gallego en Estados Unidos, con esta misma pensión, estaría en situación de indigencia”. “El Decreto”, insistió Soneira, “contrariamente lo que dice el PP, va a permitir subirle la pensión a algunos gallegos en situación precaria en países de rentas altas, y que hoy perciben prestaciones de miseria por la vinculación de ésta a la pensión no contributiva en España”.
“Lo que nunca va a hacer un Gobierno socialista”, apuntó Marisol Soneira, “es enterrar diecisiete mil expedientes en un cajón durante años como lo acontecido en Argentina en plena crisis económica y social. Eso sí que es conculcar derechos de ciudadanos”.
Datos reales
Sin embargo, los datos del Anuario Estadístico del Ministerio de Trabajo del año 2004 (todavía no hay datos disponibles de 2005) no coinciden con la valoración que realizó Marisol Soneira. Por ejemplo, la cuantía media de la pensión asistencial a emigrantes que recibieron en 2004 los 34.137 beneficiarios repartidos por todo el mundo fue de 199,49 euros. Es decir, 100 euros menos que la pensión no contributiva que reciben los residentes en España. A esto hay que sumarle que los residentes tienen acceso gratuito al sistema nacional de salud, incluídos descuentos en medicamentos, mientras que los emigrantes en raras ocasiones tienen este derecho en su país de residencia o los sistemas de protección social están en quiebra o funcionan muy mal.
Por otra parte, según estos datos, no hay ningún beneficiario de pensión asistencial que resida en un país con renta similar o igual a España con lo que se puede decir que la nueva normativa que regula las pensiones asistenciales producirá un descenso en la cuantía de las mismas a todos los perceptores de esta prestación.
Efectivamente, para un pensionista gallego residente en Cuba la pensión asistencial es un gran salario, aunque dejará de serlo según la nueva normativa, y para uno residente en Estados Unidos puede que 200 euros sea una cantidad insignificante. Lo que pasa es que en Estados Unidos no hay ningún perceptor de pensión asistencial y en Cuba hay, según datos de 2004, 2.535 españoles.
Si la pensión asistencial en España es de 300 euros, “muy modesta” según la consideración de Soneira, y eso que los criterios para fijarla están basados en los indicadores económicos de España y Europa, cabe preguntarse cómo será la pensión asistencial de un residente en Uruguay, donde hay 2.471 pensionistas, o en Venezuela, donde hay 5.547, si la base de cálculo se fijará en función de los indicadores económicos de dichos paises.
La mayor parte de los beneficiarios de pensión asistencial residen en Argentina, un total de 17.612, y el importe medio de la pensión es de 220,35 euros mensuales. Le sigue Venezuela, donde viven un total de 5.547 beneficiarios que perciben una cuantía media de 200,56 euros, y en tercer lugar se sitúa Brasil, con 3.590 beneficiarios y una cuantía media de 144,01 euros mensuales.
Según los datos de este mismo Anuario, la mayor parte de los emigrantes beneficiarios de pensión asistencial son mujeres de más de 80 años (8.744).