Aunque valoró muy positivamente la nueva ley, criticó algunas aspectos del proyecto ante la Comisión de Trabajo del Congreso.
El presidente del Consejo General de la Emigración (CGE), Francisco Ruiz, destacó ante la Comisión del Congreso que estudia el proyecto de ley del Estatuto de los Ciudadanos Españoles en el Exterior que el texto no soluciona algunas de la reivindicaciones históricas de la emigración. En concreto se refirió a la nacionalidad para los nietos o la representación directa de la emigración en las Cortes.
Ruiz compareció ante la Comisión el pasado miércoles 22 de marzo. El día anterior lo habían hecho dos representantes del movimiento asociativo, uno de las Federación Española de Retornados y el senador socialista por Ourense y emigrante, Cándido Rodríguez Losada.
Los CRE y el CERA
Para Francisco Ruiz, que en líneas generales consideró muy positivo el proyecto de ley, se han omitido, además de los anteriormente señalados, algunos aspectos relativos a los Consejos de Residentes Españoles (CRE), como es la reiterada solicitud del CGE sobre el envío de la documentación a los inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) en las elecciones de renovación de estos órganos así como el aumento de su dotación económica. También una mayor coordinación entre las oficinas españolas en el exterior y la colectividad, y señaló que la ley debe indicar que la actualización del CERA se debe realizar ‘de oficio’.
Otro aspectos que echa en falta son referencias a los emigrantes que están en la indigencia, un mayor contenido en materia de ayudas a los jóvenes y a los discapacitados, así como un mayor compromiso de la Administración con las clases de Lengua y Cultura españolas.
A pesar de estos aspectos negativos, Francisco Ruiz valoró muy positivamente el Estatuto, al igual que ya hizo en el mes de octubre el pleno del CGE, y les entregó a los diputados presentes en la Comisión una copia del informe elaborado por el Consejo.
Concepto de ciudadano
En cuanto a los aspectos positivos, Ruiz consideró que el Estatuto “tiene la virtud de recoger todos los derechos que existen y la sustitución de la ley preconstitucional de 1971, y esto ya es un gran avance” y destacó que esta norma “normaliza el concepto de ciudadano de español, con todos sus derechos, en vez del habitual concepto de emigrante” que considera ya un poco desfasado.
Por otro lado, también subrayó la creación de la Oficina del Retorno y el acento que pone el Estatuto en mejorar la coordinación entre las diferentes administraciones en materia de emigración, como algunos de los aspectos positivos, a su juicio, más importantes. El presidente del Consejo General de la Emigración destacó también la buena disposición que encontró en los diputados y pidió que dejasen a un lado las disputas políticas y lograsen un amplio consenso para que el Estatuto saliese adelante.
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Un preámbulo mejorable y que recoja los logros obtenidos
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Para el presidente del CGE el preámbulo del proyecto de ley del Estatuto de los Ciudadanos Españoles en el Exterior, si bien es extenso, “es corto en la consideración de la emigración y en especial de los exiliados”, señaló Francisco Ruiz. En concreto, consideró que faltaban algunas referencias a los principales logros políticos que han ido obteniendo los españoles residentes en el exterior “como el real decreto de cauces de participación, o el de pensiones asistenciales, que fue un triunfo del primero mandato del CGE, o también el cambio de la Ley Electoral, también promovido por el Consejo, cuando pasó a ser de oficio la inscripción en el CERA de los residente en el exterior que constaban en los registros de matrículas consulares”.
Además, Ruiz insistió en que “falta mucho contenido en lo que se refiere a las clases de lengua y cultura” y también dio importancia a la dificultad que tienen los emigrantes para que se reconozcan en España las resoluciones judiciales de otros países europeos sobre todo en materia de derecho de familia.