El presidente de la Xunta asiste en Barcelona a la entrega de los Títulos de Excelencia Gallega de AEGA-CAT

Destacó las buenas relaciones y similitudes entre Galicia y Cataluña

El presidente de la Xunta con los galardonados y los directivos de AEGA-CAT.

Los profesionales premiados con el ‘Título de Excelencia’ en sus diversos ámbitos fueron Ángel Carracedo Álvarez, catedrático de Medicina Legal y director de la Fundación Gallega de Medina Genómica; Cándido Iglesias Barciela, fundador del Grup Iglesias; Carlos Núñez Muñoz, gaitero; Manuel Villanueva de Castro, director general de contenidos de Mediaset España; José Manuel Otero Novas, diputado en las primeras Cortes democráticas y exministro de Educación y Presidencia; y Juan Carlos Escotet Rodríguez, vicepresidente de Abanca y presidente de Banesco Grupo Internacional.

El acto contó con la presencia del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, al que acompañaron el secretario d’Empresa i Competitivitat de la Generalitat de Catalunya, Joan Aregio, y el concejal d’Ocupació, Empresa i Turisme del Ajuntament de Barcelona, Agustí Colom.

El titular del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, afirmó en su intervención que Galicia está recuperando su aliento “sin perder ese tesoro nuestro que es la cohesión social”.

Después de recordar que los puentes entre Cataluña y Galicia siguen en pie, destacó que nuestras señales de identidad; el hecho de poseer una lengua y cultura propia, así como un deseo de autogobierno arraigado, no deben ser entendidos como un desafío o una amenaza. “Aquí siguen estando las puertas y ventanas para superar una geografía que quería alejar nuestra Península de Europa” indicó.

En esta línea, subrayó que ambos pueblos, por su situación de periferia, y su temprana conexión con Europa, fueron capaces de anticiparse al europeísmo a través de la busca de conexiones y la construcción de puentes, no solo físicos, sino también humanos, que salven la distancia y sean un antídoto contra la hostilidad. “Creo en el éxito, no en el exit”, aseveró, incidiendo en las secuelas del referéndum británico, al tiempo que manifestó su incomodidad ante los argumentos que sólo defienden la unidad de España o la de Europa por el interés o el miedo.“Obligar a un pueblo a elegir entre dos opciones que pueden ser complementarias es abocarlo la un desgarro interno traumático” añadió.