Gastón Juan es uno de los directivos de la colectividad española en Argentina con mayor proyección: además de ser el titular de la asociación que aglutina a los jóvenes descendientes de españoles residentes en el país austral, preside desde hace varios años la Sociedade Galega de Arantei, Vilamarín e A Peroxa de Buenos Aires, cargo al que accedió cuando aún no contaba con 30 años de edad.
Su reconocida trayectoria al frente de ambas entidades, en las que siempre buscó profundizar los lazos con las instituciones tanto de la colectividad española como así también gubernamentales, sociales y culturales de Argentina lo llevó a mantener fuertes vínculos con las autoridades porteñas.
Fue así que estando en Madrid en el marco del último pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) recibió el ofrecimiento de competir como candidato a la titularidad de la Defensoría del Pueblo.
Si bien no accedió a dicho cargo en aquella ocasión, su nombre siguió estando presente en este órgano unipersonal e independiente que tiene por misión la defensa, protección y promoción de los derechos humanos y demás derechos e intereses individuales y colectivos tutelados en la Constitución Argentina frente a los actos, hechos u omisiones de la Administración o de prestadores de servicios públicos.
Es por eso que Gastón Juan recibió con satisfacción su nombramiento como subsecretario de Derechos Sociales de la Defensoría del Pueblo porteña, a pesar de que, tal como explicó a España Exterior, esta nueva responsabilidad lo llevó a renunciar al lugar que ocupaba como presidente de la Comisión de Juventud del CGCEE, puesto ocupado ahora, aunque de forma provisional, por María Jesús Vázquez, consejera por Canadá.
“Ya cuando se barajaba mi nombre como posible candidato a ser Defensor del Pueblo había decidido dejar mi lugar en el Consejo porque si me elegían no iba a poder dedicarle todo el tiempo que requiere, y nunca me gustó hacer las cosas por la mitad”, señaló, aunque aclaró que seguirá al frente de Ajdera y de la Sociedade Galega de Arantei, Vilamarín e A Peroxa.
Si bien la Defensoría del Pueblo no tiene relación directa con las institución de la colectividad española ya que su acción se dirige a la defensa de los derechos de todas las personas que habitan la Ciudad de Buenos Aires, ya sea a nivel individual o colectivo y cualquiera sea su nacionalidad, vale recordar que en algunas situaciones particulares sí estuvo fuertemente vinculada, en especial al tomar partido directo en favor de los emigrantes españoles que fueron perjudicados por la decisión del Gobierno argentino de ‘pesificar’ las pensiones que les otorga el Estado español, a quienes representó, a través de su cuerpo de abogados, ante la justicia del país austral.
Por otra parte, cabe aclarar que a pesar de la renuncia de Gastón Juan al Consejo General, Ajdera continuará teniendo un representante en la Comisión de Juventud, aunque aún no se determinó quién viajará a Madrid para participar del próximo pleno.