El pleno del Parlamento gallego aprobó en el debate anual de política general el pasado miércoles 14 de marzo una resolución por la que se insta a la Xunta de Galicia a impulsar procesos de unión de las entidades gallegas en el exterior. La finalidad de estos procesos de unificiación sería, según la resolución propuesta por el Partido Popular, “avanzar en el objetivo de alcanzar un uso eficiente de los recursos públicos y la mejora y el incremento de las capacidades de las comunidades gallegas para desarrollar acciones a favor de los gallegos residentes en el exterior”
Asimismo, estas actuaciones debería centrarse especialmente en las áreas socio-asistenciales, de proyección económica de Galicia y cultural.
Por otra parte, el PSdeG presentó cuatro propuestas de resolución referidas a la emigración, que no fueron aprobadas. En una de ellas se instaba a la Xunta a dirigirse al Gobierno central para que “promueva la modificación de la Loreg, para suprimir el voto rogado”, y también para que proceda “a la creación de circunscripciones electorales en el exterior” posibilitando el voto en urna.
Otra propuesta se refería a que las ayudas a los gallegos en el exterior “prioricen a las entidades prestadoras de servicios asistenciales y sanitarios dirigido a personas de la tercera edad y sin recursos”.
En la tercera propuesta se instaba a la Xunta a “buscar fórmulas de financiación y de apoyo técnico, administrativo y político al Centro Gallego de Buenos Aires con la finalidad de preservar uno de los más importantes patrimonios de la galleguidad y lograr la supervivencia de este emblemático centro sanitario”.
Por último, desde el PSdeG, propusieron que se instase al Ejecutivo gallego a que presente, antes de que termine el actual periodo de sesiones, “un proyecto de ley de los derechos y deberes de los gallegos residentes en el exterior que supere la vieja Ley de Galleguidad y de respuesta a la nueva realidad de la ciudadanía gallega residente fuera de Galicia”.