El naval gallego, en peligro de desaparecer por el bloqueo de las bonificaciones fiscales

Los sindicatos hablaron directamente de un “riesgo de desaparición del sector” y la CIG no descartó convocar movilizaciones para las que solicitó un “respaldo masivo”.
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, reclamó al Gobierno central  mostrar con el sector naval “la misma sensibilidad e interés” que tuvo con el carbón y a mediar ante las autoridades europeas. Feijóo que calificó las medidas de “abruptas” y de las que, dijo, se tomaron sin meditar sus efectos “directos e indirectos” sobre la economía gallega y española, reveló que envió el pasado mes de junio una carta al presidente de Gobierno central, José Luis Rodrríguez Zapatero, en la que señalaba la conveniencia de “negociar con los servicios de la Comisión europea un mecanismo alternativo y una salida pactada al procedimiento de revisión del tax lease”. En su misiva, Feijoo cifra el impacto en Galicia de la “posible paralización» de las ayudas en 1.100 millones de euros. Feijóo resaltó que la Xunta lleva trabajando con el sector naval desde el principio de la legislatura con todas las medidas de apoyo disponibles y “mostrando un compromiso inequívoco con este sector económico y empresarial”.
Por su parte el conselleiro de Industria, Javier Guerra, se reunió con urgencia con el Clúster del naval para estudiar la situación. En la reunión se apostó por implantar un régimen transitorio para evitar que la apertura del procedimiento de la Comisión Europea al tax lease español, o sistema de bonificación fiscal, tenga efectos suspensivos inmediatos. Al mismo tiempo demandaron para los buques que están en pleno proceso de construcción que el procedimiento comunitario “no tenga ningún tipo de efecto retroactivo sobre las obras en curso”.  Según el clúster 53 nuevos contratos están pendientes de que se resuelva el procedimiento.
Barreras en concurso de acreedores
El astillero vigués Hijos de J. Barreras comunicó su intención de acogerse a la Ley Concursal debido al “vacío legal” en lo que se refiere a las bonificaciones fiscales conocidas como ‘tax lease’  y que “no permite enganchar nuevos contratos”, dejando a la empresa en una situación de “debilidad dramática”.
Así, con la tramitación anunciada por la empresa, esta dispondrá de “cuatro meses” para negociar con los acreedores que estiman que la deuda total del astillero alcanzaría entre 50 y 60 millones de euros.