El ministro García-Margallo defiende la nueva regulación de la Acción y el Servicio Exterior porque la actual es “obsoleta”

“No se puede hacer una diplomacia del siglo XXI cuando tenemos un esquema de los primeros años del siglo XX”, dijo

José Manuel García-Margallo y Soraya Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros del viernes 1 de marzo.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, destacó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que con esta norma “se trata de dotar a la acción exterior del Estado de coherencia para saber qué nos interesa, por qué se actúa y cómo se debe actuar”.

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo subrayó que esta ley es “absolutamente necesaria” puesto que “tenemos una normativa obsoleta”. “No se puede hacer una diplomacia del siglo XXI cuando tenemos un esquema de los primeros años del siglo XX”, dijo.

La nueva norma refuerza la capacidad del Gobierno, en tanto que director de la Política Exterior, para coordinar la Acción Exterior; revitaliza el Consejo de Política Exterior, y su Consejo Ejecutivo; establece instrumentos de planificación que permitan que la acción exterior sea integrada y una plena conexión entre la acción exterior y la política exterior, y concibe el Servicio Exterior del Estado como el instrumento fundamental para la ejecución de la política exterior y la acción exterior al integrar en él a todos los órganos de la Administración General del Estado que actúan en el exterior, así consagrar a los Embajadores como los órganos directivos a los que corresponde la coordinación de todos ellos.

Según el Gobierno las novedades y cambios que la presente ley comporta son de tal envergadura que no pueden ser llevados a cabo en solitario por el Gobierno. Se requiere un acuerdo básico entre las fuerzas políticas, las Comunidades Autónomas, las organizaciones empresariales y sindicales, el mundo de la cultura y la comprensión y adhesión de toda la sociedad española.

Contenido

El texto enumera los que son principios rectores de la acción exterior del Estado y que persiguen dotarla de unidad y coherencia interna, más allá de la suma de las acciones sectoriales; planificarla, garantizar su eficacia y eficiencia, reconociendo la necesaria especialización en su ejecución; y ponerla al servicio de los intereses generales de España.

Asimismo, establece un sistema de información y comunicación de las actuaciones en el exterior y de los viajes y visitas al exterior de todos los actores, que se especifican, lo que persigue una doble finalidad: que el Gobierno facilite a los sujetos de la Acción exterior apoyo en su ejecución; y, en lo que a los órganos constitucionales y Administraciones públicas concierne, que pueda emitir recomendaciones acerca de la adecuación de dichas actuaciones a las directrices, fines y objetivos de la Política Exterior y a la Estrategia de Acción Exterior.

Se regulan los instrumentos de planificación y seguimiento de la Acción Exterior como son la elaboración de la Estrategia de Acción Exterior para un periodo de cuatro años y el Informe de Acción Exterior que da cuenta de lo ejecutado y logrado.

En cuanto a los mecanismos de coordinación, presta especial atención al Consejo de Política Exterior, órgano colegiado asesor del presidente del Gobierno que se configura como el principal garante de la coherencia interna de la acción exterior del Estado y la plena coordinación entre la acción exterior y la política exterior.

Servicio Exterior del Estado

Por último, configura una nueva organización de la Administración del Estado en el exterior, el Servicio Exterior del Estado, que persigue la unidad de acción de todos los órganos de la Administración General del Estado en el exterior. Como novedad, la Ley establece las bases para que el Consejo Ejecutivo de Política Exterior pueda recomendar la adopción de medidas de gestión integrada en las misiones diplomáticas a través del establecimiento, allí donde se considere necesario o conveniente, de una Sección de Servicios Comunes que procure, además, un más eficiente aprovechamiento de los recursos humanos y materiales públicos.

A este respecto, se introduce la posibilidad de aprovechar el Servicio Europeo de Acción Exterior y de sus delegaciones en el exterior o de acordar con países iberoamericanos la creación de oficinas sectoriales conjuntas en terceros Estados para el desarrollo de ámbitos específicos de la Acción Exterior.

Apoyo a las Autonomías

El ministro José Manuel García-Margallo avanzó que se va a invitar a las comunidades autónomas a trabajar con el Gobierno para que “sean más eficientes y sirvan mejor a sus ciudadanos”. Asimismo, se les invitará a “compartir servicios, edificios y funcionarios en las representaciones en el exterior”.

García-Margallo aclaró que el objetivo es ofrecer apoyo logístico a las delegaciones autonómicas en sus desplazamientos al extranjero y definió estas medidas como un “paso más en el reconocimiento del estado autonómico”, que no se había dado hasta ahora.