La inflación subyacente, que excluye del índice general los precios de los alimentos frescos y la energía, mantuvo su tasa interanual en el tres por ciento. En la evolución de los precios en junio destacó el descenso de los del grupo de vestido y calzado, con el 0,6 por ciento, consecuencia del inicio de las rebajas, y la bajada del 0,3 por ciento del transporte, debido al descenso de los precios de los carburantes y lubricantes respecto a mayo. En cuanto a las subidas, destacó la de los alimentos y bebidas no alcohólicas en un 0,5 por ciento, principalmente debido al incremento de precios de la carne de ave, en un seis por ciento, y del pescado fresco, en un 1,2 por ciento.
También aumentó el 0,5 por ciento el ocio y la cultura, consecuencia de la subida de precios de los paquetes turísticos, y se incrementó el 0,4 por ciento el grupo de hoteles, cafés y restaurantes. En tasas interanuales, resaltó la subida del 7,3 por ciento de la vivienda, a pesar de que disminuye dos décimas, debido fundamentalmente a la bajada de los precios del gasóleo para calefacción frente a la subida que experimentaron en junio del año pasado, que hizo que disminuya más de ocho puntos, situándose en el 19,2 por ciento.
También aumentó el 6,7 por ciento la tasa interanual del transporte, un punto menos que en mayo, debido al descenso de los precios de los carburantes y lubricantes, cuya tasa anual se reduce más de tres puntos y se sitúa en el 12,2 por ciento. Incrementaron su tasa interanual, los hoteles, cafés y restaurantes, 4,5 por ciento, y los alimentos y bebidas no alcohólicas, 4,1 por ciento, cinco décimas más que en mayo.