El Instituto Ramón Rubial presenta su campaña para prevenir el tráfico y consumo de drogas en el extranjero

Hay 1.708 españoles encarcelados en otros países por delitos relacionados con los estupefacientes

Pedro José Sanz, Carmen Moya, Jimena Sanclemente y Ana Gallego en la presentación de la campaña.

Los datos del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación a 15 de marzo de 2010 indican que son 2.145 los españoles que permanecen detenidos en cárceles extranjeras, de los cuales el 80% (1.708) han cometido delitos relacionados con el consumo o tráfico de drogas. Esta situación, explicaron en el acto Carmen Moya, delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, y Jimena Sanclemente, directora de Programas de la Fundación Ramón Rubial, tiene que ver con que existe una especie de mito que dicta que fuera de España la tolerancia al consumo y al tráfico de drogas es mayor.

Mientras Andalucía, Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana y Canarias son, en ese orden, las Comunidades Autónomas con mayor número de personas encarceladas en otros países, las naciones con mayor número de detenidos por drogas son Perú (249), Brasil (181), Marruecos (156), Portugal (145), Francia (113) e Italia (107). Estos datos, indicó Moya, demuestran que “es falso que los países extranjeros sean más permisivos” que España y que las detenciones no solo ocurren en “países lejanos”, sino que los europeos también cuentan con una legislación rigurosa.

Sanclemente resaltó que el consumo conlleva “unos costes muy altos” y lo ejemplificó con el caso real de dos jóvenes españoles que “por fumarse un canuto” tuvieron que cumplir condena en dos países árabes con un sistema carcelario muy estricto.

En el acto también participaron la subdirectora general de Cooperación Jurídica Internacional del Ministerio de Justicia, Ana Gallego, y el subdirector General de Protección de los Españoles en el Extranjero, del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, Pedro José Sanz, quien alertó de que el consumo de drogas en otros países puede castigarse “hasta con la pena de muerte”.

Ambos ministerios están implicados y muy pendientes de las solicitudes de traslado a España de los presos españoles en el extranjero. Sin embargo, Gallego explicó que estas peticiones no pueden cursarse hasta que no exista una condena firme, las que en ocasiones pueden tardar años en producirse. El proceso de tramitación es largo, señaló, sobre todo cuando la pena impuesta es mucho mayor que en nuestro país o cuando las condenas aplicadas no existen en España, como ocurre con la cadena perpetua o la pena de muerte.

La campaña
La campaña es una iniciativa del Instituto Ramón Rubial de la Fundación IDEAS, financiada con 20.000 euros por la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, en la que colaboran los Ministerios de Asuntos Exteriores y Cooperación y Justicia.

La campaña se realizará en dos fases: una primera, cercana a Semana Santa, y una segunda poco antes de las vacaciones de verano, épocas en las que se incrementan los viajes al extranjero. Para divulgar los mensajes se distribuirán 2.000 carteles y 170.000 en más de 600 puntos de paso frecuente de viajeros o personas con intención de viajar, en todo el territorio nacional.

El Instituto Ramón Rubial de la Fundación Ideas puso en marcha en 1998 el programa ‘Presos españoles en el exterior’, para dar respuesta a la demanda creciente de asistencia a españoles en prisiones extranjeras. Jimena Sanclemente comentó que la entidad ha colaborado hasta ahora en la resolución de cerca de 1.400 expedientes y en el presente se ocupa de los casos de más de 500 personas detenidas en el extranjero, la mayoría por delitos relacionados con las drogas.