Luego de la entonación de los himnos de Argentina y Galicia por parte del Coro Polifónico del Centro Gallego de Buenos Aires y de unas breves frases recordatorias sobre la trayectoria de Martínez Lamela a cargo de Manuel Padorno, integrante de la junta directiva del Instituto Argentino de Cultura Gallega, tomo la palabra el actual presidente de la entidad, Antonio Núñez Neira.
“En nombre de todos quienes lo conocimos, queremos decirle gracias por dejarnos un legado tan importante que tenemos que cuidar y acrecentar para las futuras generaciones, un espacio de cultura maravilloso que posee un valioso patrimonio cultural”, recalcó Núñez Neira, y mencionó como ejemplos de ese legado la Biblioteca Manuel Murguía (una de las más importantes de temática gallega en Buenos Aires, con más de 20 mil volúmenes en su catálogo), la videoteca, el archivo musical, la Sala de Arte Isaac Díaz Pardo, el Coro Polifónico, el Teatro Castelao y la presencia ininterrumpida cada año de la entidad en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.
Citando a Martínez Lamela, quien en cada oportunidad que tenía decía con orgullo “Aínda sen saber por qué, desde pequeno, sempre me sentín galeguista”, Núñez Neira subrayó su invalorable defensa del idioma y las tradiciones de la causa gallega, y añadió: “Por eso, seguramente al asumir como primer presidente del Instituto de Cultura habrá sentido un enorme orgullo y una gran responsabilidad, esa que ponía de manifiesto en cada uno de sus actos”.
A más de cuatro décadas de tomar la responsabilidad de presidir la primera comisión directiva del Instituto Argentino de Cultura Gallega, cargó que asumió el 15 de diciembre de 1970, las actuales autoridades de la entidad, quienes estuvieron acompañadas por las del Centro Gallego de Buenos Aires, encabezadas por su actual presidenta, Marta Donsión, honraron así, en un pequeño pero emotivo homenaje, a una de las personas más destacadas de la colectividad gallega en Argentina.
“A pesar de no encontrarse ya físicamente entre nosotros, seguramente Don Manuel hoy se sentiría muy feliz de saber que en esta institución se lo recuerda y se le rinde un merecido homenaje, tan sencillo y afectuoso como su manera de ser”, concluyó Núñez Neira.