La consellera d’Afers Socials, Promoció i Immigració, Fina Santiago, recordó que los ciudadanos, inmigrantes o no, tienen la obligación de empadronarse en su municipio de residencia y que las administraciones tienen la obligación de facilitarles este trámite, según el artículo 15 de la ley de bases reguladora del régimen local. “Tenemos una ley y las leyes se deben cumplir”, subrayó la consellera.
Santiago hizo estas declaraciones en el trancurso de la presentación de la campaña para fomentar el empadronamiento de la población inmigrada, que se realiza en las Islas desde hace ocho años y que este año se refuerza con la distribución de 15.000 dípticos y 500 carteles entre los servicios sociales de los ayuntamientos, los sindicatos, los locutorios y los casals de inmigrantes. Se trata, señaló Fina Santiago, de una campaña “que se dirige a todos los ciudadanos en general, pero específicamente a los ciudadanos que no proceden de la Unión Europea y que tal vez tengan más desconocimiento de los deberes de un ciudadanos ante la Administración y también sus derechos”. En Baleares, según los últimos padrones, hay 100.000 extracomunitarios, “lo que supone que entre un 10 y un 12 por ciento de la població no procede de ninguno de los 25 paísos de la Unión Europea”, dijo Santiago.