Además, desde el Ejecutivo estudian, como medida para atajar las consecuencias de la crisis, que las personas en paro puedan rescatar el dinero invertido en planes de pensiones privados.
“No es el momento de grandes beneficios, es el momento de apoyar a las empresas y las familias”, subrayó José Luis Rodríguez Zapatero, que añadió que el Gobierno va a “trabajar duro” para salir de la actual situación económica porque es su responsabilidad. Sin embargo, también pidió el compromiso y la responsabilidad de Comunidades Autónomas, Ayuntamientos, empresarios, trabajadores y, especialmente, el apoyo de los bancos. En este punto, recordó que los respaldó “como todos los gobiernos, porque su estabilidad es imprescindible”.
“Todos podemos aportar algo”, dijo, “a los únicos que no podemos pedirle nada es a los que han perdido su empleo porque es a los que tenemos que ayudar”, concluyó.
Por otra parte, el secretario de Estado de Economía, David Vegara, en un encuentro organizado por la Asociación Aragón Exterior, confirmó las declaraciones realizadas por el director general de Seguros y Fondos de Pensiones, Ricardo Lozano, y admitió que el Gobierno estudia mejorar la liquidez de los planes de pensiones privados y ampliar las excepciones sin penalización por el rescate de las aportaciones hechas, informó EFE. Se trataría, al parecer, de que los parados que lleven seis meses en desempleo puedan rescatar el dinero invertido, así como también si el cónyuge pierde su trabajo y la situación se prolonga durante más de seis meses.
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El PP considera que el país vive una crisis “made in Spain”
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La portavoz del grupo popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó que mientras todo el mundo vive una crisis financiera, en España hay una crisis “made in Spain”, que considera que se debe al agotamiento de un modelo económico junto a “la incapacidad de Zapatero durante cinco años para cambiarlo”. Durante su intervención en el primer Congreso del PP en Reino Unido, indicó que la crisis económica colocó a España en la recesión, en la destrucción de empleo, en la caída en picado del consumo y en un descenso de la producción industrial sin precedentes. Además, recordó que cuando gobernaba el PP, la mitad del empleo que se creaba en la Unión Europea (UE) era español, a diferencia de la situación actual, en la que nueve de cada diez puestos de trabajo que se destruyen en la UE son españoles, indicó.