El jefe del Ejecutivo autonómico, que hacía estas declaraciones hoy en Caudete (Albacete), manifestó que no se va a modificar la Ley por lo que no se trasvasará más agua de la autorizada y que “la raya” que marca el límite de lo trasvasable se va a mantener.
“No va a pasar un solo litro”, añadió el presidente Barreda, que reiteró su defensa de los intereses hídricos de Castilla-La Mancha y los castellano-manchegos para que “el agua que discurre por tierras castellano-manchegas las utilicemos nosotros prioritariamente”.
En el mismo sentido se pronunció el vicepresidente segundo y portavoz del Gobierno regional, Emiliano García-Page, quien afirmó que nos encontramos en una situación de escasez extrema de agua ante la que el río Tajo “no da más de sí” y hay que cumplir la ley en este sentido.
Por su parte, el vicepresidente primero del Gobierno regional, Fernando Lamata, volvió a reiterar que el trasvase desde la cabecera del Tajo al Segura tiene fecha de caducidad y no tiene ningún sentido en pleno siglo XXI porque existe la alternativa de la desalación.