En toda España los consulados uruguayos se encargarán de remitir los formularios a Madrid, si bien se puntualiza que esta vía “ni asegura o garantiza un camino hacia la regularización”.
Estudio individualizado
Según las responsables del consulado de Uruguay en Palma de Mallorca, la cónsul Beatriz Tellechea y la vicecanciller María Victoria Boix, la nueva vía “es una oportunidad que se abre a los uruguayos y que consiste en que las autoridades españolas van a estudiar caso por caso y a aplicar la solución más favorable hacia los ciudadanos uruguayos”. Las autoridades consulares han recalcado que el hecho de rellenar los impresos “no implica la regularización automática”.
El Gobierno español no va aplicar a los originarios de esta nación de América del Sur un trato especial y, como recuerdan desde la oficina consular de Balears, “la regularización podría darse por dos vías: la vía ordinaria, que incluye la presentación de un contrato de trabajo y la vía del arraigo”.
El plazo límite para que los formularios lleguen a Madrid es el próximo 15 de junio y después las autoridades decidirán expediente por expediente.
A pesar de la sentencia de la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Balears en la que se reconocía a una inmigrante uruguaya, representada por la abogada Dolores Puerta, el derecho a los permisos de residencia y trabajo en cualquier actividad, otros compatriotas, en idéntica situación y en aplicación del tratado de 1870, han tenido que formular demandas contra la delegación de Gobierno para obtener su regularización.