El Defensor del Pueblo critica las dificultades para votar que padecen los españoles en el extranjero

En el Informe de 2016 señala que “no es de recibo” la bajísima participación electoral registrada entre los ciudadanos en el exterior

La presidenta del Congreso, Ana Pastor, recibió el Informe del Defensor del Pueblo 2016 de manos de Soledad Becerril.

El pasado 28 de febrero la defensora del pueblo, Soledad Becerril, presentó ante el Congreso y el Senado el Informe de 2016 de la institución que dirige. En este documento se afirma que la repetición de las elecciones generales, el 26 de junio de 2016, puso de manifiesto, de nuevo, los problemas del voto por correo de los españoles residentes en el extranjero.

Sobre esto, la institución del Defensor del Pueblo señala que “no es de recibo la bajísima participación de este colectivo que reiteradamente se produce en los comicios, no por la voluntad del elector, sino por las dificultades que padece para votar”. Y añade, “es de esperar que en la nueva legislatura se aborde, por fin, este problema”.

Con motivo de la celebración de las elecciones generales de junio de 2016, y ante la queja formulada por una organización sindical, desde la Oficina del Defensor del Pueblo realizaron una recomendación al Gobierno para que se reforzaran los mecanismos de coordinación entre los distintos departamentos ministeriales que participan en la gestión del voto por correo desde el exterior, para eliminar los obstáculos y agilizar los procesos, de tal modo que la participación electoral de este colectivo en el exterior se incrementara y “permitiera su legítima participación en los asuntos públicos, tal y como está reconocido constitucionalmente”.

Aunque la recomendación fue aceptada, dentro de las limitaciones que ofrece el actual sistema electoral, el informe señala que la participación fue de un 6,3%. “Los datos arrojan una abstención del 93,7 %, debiendo cuestionarse si esta abstención obedece a razones reales de renuncia al ejercicio de este derecho mediante el mecanismo de la abstención o a la imposibilidad material de ejercer el derecho al voto por los ciudadanos debido a otros inconvenientes o trabas burocráticas ajenas a la voluntad del particular”, señala el documento.

En el informe se señala que el mayor porcentaje de quejas recibidas relativas al régimen electoral se siguen centrando en el voto de los residentes en el extranjero y en concreto a la falta de recepción de la documentación a tiempo para votar.

También se indica que se han recibido numerosas quejas procedentes del colectivo de residentes españoles en el exterior que no han recuperado, o lo han hecho de forma parcial, los gastos efectuados para el envío del voto desde el exterior.