Así, con los votos del PSOE y Coalición Canaria, la Cámara Baja rechazó la propuesta, que instaba al Gobierno a devolver íntegramente los ahorros a los 400.600 afectados por la crisis filatélica, muchos de ellos emigrantes, mediante la compra de sus créditos por parte del Estado y el pago escalonado a los ahorradores. Según esta iniciativa, el coste para el Estado sería cero, ya que después recuperaría los pagos mediante una liquidación ordenada de los activos de las empresas afectadas.
En el transcurso del debate, el portavoz adjunto del PP en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, defendió un fondo de garantía que devuelva sus ahorros a las “familias de rentas medias y bajas” que perdieron su dinero. Mientras, el portavoz del PSOE, Ricard Torres, explicó que aún se desconocen los activos que ayudarían a crear las liquidaciones de las que habla el acuerdo entre el PP y CiU, con lo que justificó su rechazo a la propuesta, asegurando que está dispuesto a estudiar medidas que tengan utilidad para los afectados. El presidente de la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae), Manuel Pardo, se alegró de que se rechazase la devolución, ya que supondría “dar la razón a los defraudadores”. Indicó que “se está demostrando que no existen activos en las empresas afectadas”, lo que hace “imposible” cumplir esta demanda.
Por su parte, los ex presidentes de Afinsa, Juan Antonio Cano Cuevas, y de Fórum Filatélico, Francisco Briones, amenazaron con una demanda civil al Estado por daños y perjuicios, por la intervención judicial.