Justamente a éstos fue a quién homenajeó la directiva que preside Moldes, entregando medallas por haber cumplido 25 años de socios a Manuel Rodríguez, Washington Martínez, Óscar Montserrat, Fernando Moldes, Santiago Malabia, Gabriel Polcino y Héctor Bertolotti.
La institución más longeva de la colectividad española de Montevideo, está atravesando un juicio realizado por algunos de sus empleados que pueden provocar una erogación financiera de importancia, y a decir de su presidente ante la situación que se vive en España deberán enfrentar la contingencia, por ello la austeridad en la celebración que fue “una reunión de amigos”.
A ella asistió el cónsul general de España, Eduardo de Quesada, el jefe de la Consejería de Empleo y Seguridad Social, Andrés González, el consejero de,l Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, Rafael Gómez, y demás directivos de varias instituciones, así como también gran parte de los asociados del club.
Fue justamente el cónsul general, Eduardo de Quesada, quién precisó que es lógico “que una institución más que centenaria tenga esos decursos, de épocas de mejoras y de desfallecimientos, decía (Moldes) que no llegan los recursos de la Administración Central (española) que es la principal instancia de la que depende, pero no se si le sirve de consuelo que tampoco las autonomías, si fuera ese el nexo de dependencia hubieran acudido con mayor magnanimidad en la ayuda de éste centro hoy menguado en sus recursos”.
Explicando que “tenemos el Hogar Español de Ancianos que es referido por todos nosotros como el buque insignia de las instituciones españolas del Uruguay que atraviesa por una situación delicada y que el año pasado estuvo en una situación de cierre inmediato que afortunadamente pudimos en el último momento superar”.
“La crisis es para todos, añadió, no están libres ninguna de nuestras instituciones, como no salen indemnes los bolsillos de la inmensa mayoría de los ciudadanos españoles”, aunque culminó señalando que “afortunadamente parece que hay pálidos indicios, aún no consolidados, de un horizonte de recuperación” para dicha crisis.
Emotivas palabras
La fiesta estuvo amenizada por el Coro del Club Español, y quedó en la memoria de la reunión austera parte del discurso de Víctor Moldes donde precisaba que “la institución desde siempre se hizo con sus integrantes y con aquellos que acompasan el corazón de ésta institución. Aquellos que en definitiva agregan el latido personal al latido institucional, porque de eso se hacen las instituciones: de sentimientos; y creemos firmemente que el mayor patrimonio del Club Español es la cantidad de gente que la quiere, que la respeta, que la prodiga, y que propende siempre en definitiva a un mejor designio que es a lo que nosotros como administradores eventuales estamos comprometidos”.