El Centro Gallego de Tenerife celebra con las principales autoridades canarias sus 50 años de existencia

Asistió el presidente del Gobierno isleño, Paulino Rivero

Paulino Rivero en el brindis por los 50 años del Centro Gallego de Santa Cruz de Tenerife.

El Centro Gallego de Santa Cruz de Tenerife celebró el pasado 7 de diciembre el 50 aniversario de su fundación con un acto institucional  al que asistieron el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino  Rivero; el alcalde de la capital tinerfeña, José Manuel Bermúdez y  Consejera Insular de Deportes, María del Cristo Pérez, -que lo hizo en representación del presidente del Cabildo Insular que excusó su  asistencia- así como socios y amigos del Centro.

Al comenzar el acto, el presidente del Centro Gallego, Eduardo  Sánchez Solla, tomó la palabra para dar la bienvenida a autoridades  e invitados e hizo una semblanza de la historia de la institución y  destacó el carácter universal de los dos pueblos, canario y gallego,  por su adaptabilidad a otros territorios y por su tolerancia. En  segundo lugar lo hizo la consejera del Cabildo de Tenerife que, entre  otras cosas, deseó una larga vida al Centro Gallego.

El alcalde la ciudad, por su parte, hizo referencia a la presencia de  la Cruz de Santiago en el escudo de la ciudad y del nombre del  apóstol en la denominación oficial de la misma (Santa Cruz de  Santiago de Tenerife) y dijo que “el Centro Gallego, a pesar de su  carácter privado siempre ha estado abierto a la sociedad tinerfeña.

Finalmente, el presidente del Gobierno de Canarias hizo hincapié  sobre las palabras del presidente del Centro Gallego y añadió que  esa tolerancia común de gallegos y canarios viene dada por que ambos  se sitúan en la periferia del Estado.

Después de estas intervenciones se entregaron metopas conmemorativas  del acto a autoridades y medios de comunicación y se hizo un brindis  con cava para cerrar el acto institucional, que se remató con las  actuaciones de las Escuelas de Sevillanas, de Tango y de Gaita y  Percusión que desarrollan su labor en el Centro Gallego y con una  cena en el restaurante de la sociedad.