El Centro Cultural de España en Buenos Aires acogió el cuarto Congreso de Lenguas Minorizadas

Organizado por el Instituto de Lengua e Investigación de la Fundación de Cultura Gallega Xeito Novo

Patricia Bouzas, Susana Blanco y Graciana Vázquez Villanueva disertaron sobre la lengua gallega.
Gustavo Fernández, presidente de la Fundación de Cultura Gallega Xeito Novo.

La importancia de esta iniciativa, que año a año se va consolidando, se reflejó en las relevantes instituciones que colaboraron en su organización, entre ellas la Secretaría de Cultura del Gobierno argentino, la Delegación del Gobierno de Cataluña en el país austral, el Instituto de Lingüística de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y la Fundación España.
El concepto de lenguas ‘minorizadas’ intenta dar cuenta de un proceso que implica la reducción de las funciones y espacios de uso de las lenguas, las cuales dejan de ser un vehículo de comunicación para determinadas prácticas sociales. Esta situación provoca que los hablantes de estas lenguas se encuentren en una relación de inferioridad respecto a los hablantes de las lenguas a las cuales se les confiere un mayor prestigio.
De esta manera, explicaron los organizadores, “surge una problemática para los grupos lingüísticos minorizados: por un lado, se ven exigidos a identificarse con el grupo dominante, y por el otro necesitan luchar para conservar su identidad. En casos extremos esto implica una actitud de repliegue que tiene como consecuencia un aislamiento geográfico como forma de resistencia al poder hegemónico”.
En los últimos años, la problemática en torno a la relación lengua y poder se instaló en la conciencia pública; en ese sentido, la realización del congreso se enmarca en la necesidad de debatir conceptos como la diversidad lingüística y la interculturalidad, al cumplir la lengua un papel fundamental en la conformación de la identidad de los grupos sociales.
Las diferentes políticas
En función de este objetivo, importantes académicos especializados en esta cuestión debatieron a lo largo de las dos jornadas sobre las políticas lingüísticas implementadas en los diferentes territorios, centrándose principalmente en Latinoamérica y Europa.
En esta edición, las lenguas analizadas fueron el gallego, catalán, vasco, gaélico, indio, occitano y chaná, según los siguientes ejes temáticos: economía y lenguas minorizadas: incidencias y articulaciones; políticas linguísticas: desde organismos estatales y regionales a agentes no gubernamentales y organizaciones independientes; diversidad e inmigración en el ámbito educativo y laboral, y grupos linguísticos europeos y latinoamericanos: grados de minorización, semejanzas y diferencias en cuanto a políticos internas y externas, y su posibilidad de organización, difusión y supervivencia.
La apertura del congreso estuvo a cargo del presidente de la Fundación Xeito Novo de Cultura Gallega, Gustavo Fernández, quien estuvo acompañado por María Luz Marchio, del departamento de Lengua e Investigación de la institución organizadora, y Jordi Font, delegado del Gobierno catalán en Argentina.
“El Congreso de Lenguas Minorizadas es una actividad que ya se consolidó y tomó renombre, ya que son los propios expositores los que se acercan a nosotros para participar”, señaló Fernández a España Exterior, y recalcó que el Centro Cultural de España en Buenos Aires es el marco ideal para acoger esta iniciativa.
Según explicó, estos congresos tuvieron su origen en las fiestas culturales que los integrantes de Xeito Novo compartieron con otros colectivos emigrantes, como los vascos, escoceses y ucranianos: “En esas reuniones empezamos a debatir sobre la problemática que afecta a nuestras lenguas y se nos ocurrió organizar una actividad donde se pudiera tratar este tema y comparar los casos de cada colectividad. Luego de unos años de preparación para dotar al congreso de un contenido académico, llegamos a la primera edición, que tuvo lugar en el Museo de los Emigrantes en 2006”.
Al ser consultado sobre la situación de la lengua gallega, Fernández aclaró: “Desde Xeito Novo llevamos adelante una lucha constante por la preservación de su idiosincrasia. Si bien en un principio las nuevas generaciones de gallegos que viven en Argentina no son muy receptivas al estudio del gallego porque no reporta muchas oportunidades en el ámbito laboral, los nietos de emigrantes han comenzado a demostrar un interés ligado más al aspecto cultural e histórico de Galicia, y en esto mucho han tenido que ver sus abuelos”, concluyó.
A pesar de estar orientado principalmente a profesionales y estudiantes de lingüística, el crecimiento que año a año tuvo el congreso provocó que varios organismos públicos se interesaran en el mismo. “Hemos tenido muy buenas repercusiones incluso en el exterior: ya tenemos ofrecimientos para que el año próximo se realice en otro país o en alguna ciudad del interior argentino, donde también hay mucha inquietud sobre este tema, principalmente en lo que tiene que ver con las lenguas originarias”, añadió.

Los casos catalán, vasco y gallego

La jornada inaugural del congreso estuvo centrada en las lenguas vinculadas al territorio español. En primer lugar, se debatió sobre el caso catalán: Esther Barnet, profesora de catalán del Casal de Catalunya de Buenos Aires y Licenciada en Filosofía y Letras de la Universitat Autónoma de Barcelona, y Thiago Mori, Doctor en Lengua y Literatura Catalana por la misma universidad, brindaron una conferencia titulada ‘Bilinguismo pasivo e idioma de frontera: problemáticas y perspectivas de la producción oral en clases de catalán’.  A continuación, se estudió el caso vasco; Sabrina Otegui, de la Asociación Escuela de Lengua Vasca de Buenos Aires, disertó sobre los aciertos y puntos a revisar del programa de enseñanza ‘Argentinan Euskaraz’. Cerrando la jornada, tres docentes de la UBA, Patricia Bouzas (Chips y ramas: la lengua gallega ‘en exposición’), Susana Blanco (Internet y la formación de imaginarios sociales en Galicia) y Graciana Vázquez Villanueva (Ideologías linguisticas) se refirieron al caso gallego.