El Centro Andaluz de Córdoba entregó alimentos a emigrantes andaluces gracias a la ayuda de la Junta de Andalucía

Los beneficiarios agradecieron el gesto realizado por la entidad regional y la Administración autonómica

Grupo de emigrantes que se dieron cita en Casa de España.

El Centro Andaluz de Córdoba entregó alimentos no perecederos a alrededor de 40 emigrantes andaluces gracias a la colaboración de la Junta de Andalucía. En diálogo con Andalucía Exterior, Juan Fernández Lidueña, presidente de la entidad, explicó que “mensualmente los miembros del centro, a través de un convenio con el Gobierno andaluz, entregamos medicamentos a todos los emigrantes que los necesitan; en cuanto a las ayudas de alimentos, prótesis o de otro tipo, éstas se realizan esporádicamente, sólo cuando contamos con dinero para ese fin, como en este caso”.

Respecto a quiénes reciben medicamentos y otros tipos de ayudas, Fernández Lidueña indicó que “están dirigidos a los andaluces nativos y al cónyuge. El centro cuenta con una asistente social que lleva un registro de los emigrantes que por su estado de salud y situación económica, necesitan los medicamentos. Además, ella visita el domicilio de las personas para saber con quiénes viven, en qué condiciones y de ese modo verificar que las ayudas son recibidas por quienes realmente las necesitan”.

La opinión de los beneficiarios
María del Carmen Sáez Guardia nació en Motril, Granada, y llegó a Argentina con su madre y hermanos en diciembre de 1951, allí los esperaba su padre, que había viajado tiempo antes. Se asentaron en la provincia de San Juan donde trabajaban el campo, allí María se casó pero debido a la sequía que asolaba esa provincia se vio obligada a trasladarse con su marido e hijos a Córdoba. En esta ciudad ayudó a su marido a sostener el hogar trabajando en casas de familia. Actualmente su marido es jubilado por discapacidad. María es socia del Centro Andaluz y explica que “hace cuatro años fui operada de cataratas gracias a la ayuda del Gobierno andaluz que aportó el dinero para costear la mitad de la operación, además recibo los medicamentos para tratar mi problema de artrosis y de osteoporosis, estoy muy satisfecha con la política social del gobierno”, expresó.

Por su parte, Manuel Carmona García es oriundo de Armonilla, Jaén, y arribó a Argentina en 1949 con un hermano, sus padres habían llegado antes. Manuel ama la música y perteneció a la orquesta de Pepe Rodríguez, un conocido músico andaluz que recorría el país con su arte. Un día Manuel llegó con la orquesta de Pepe a Córdoba y decidió quedarse a vivir aquí, donde formó su familia. Es socio del Centro Andaluz desde hace 20 años y recibe los medicamentos que necesita para sus problemas de salud. Manuel está muy agradecido al Gobierno andaluz porque “pese a que durante 40 años realicé aportes jubilatorios en Argentina, sólo recibo 770 pesos (aproximadamente 150 euros) mensuales, que no me alcanzan para comprar los medicamentos que necesito, también me parece importante esta ayuda en alimentos, considero que el Gobierno debe seguir colaborando con los paisanos que están atravesando una mala situación económica”, señaló.

En tanto, José Mael Andrés nació en Orce, Granada, y llegó a Argentina con su madre en 1957; su padre era refugiado de la Guerra Civil y había arribado unos meses antes al país. Se asentaron en Córdoba y su padre trabajó primero en el tendido de líneas eléctricas y luego instaló un puesto de venta de frutas y verduras. José se casó y tuvo tres hijos. Es socio del Centro Andaluz y recibe los medicamentos que necesita por su problema de hipertensión, también le entregan medicamentos a su hijo, que está afectado de tiroides. “Creo que es muy importante que el Gobierno andaluz siga ayudando a los emigrantes pues con el monto que cobro de jubilación apenas me alcanza para sobrevivir”, destaca.
María Dolores Veraguas Cortés, llegó en 1951 con sus padres y hermanos, se asentó con su familia en la zona rural de Córdoba, donde vivió 20 años. Después contrajo matrimonio y se trasladó a la capital cordobesa. Es socia del Centro Andaluz y recibió durante varios años los medicamentos, actualmente necesita remedios para controlar la tensión y para mitigar una afección a los huesos. María Dolores sostiene que “es relevante que la Junta de Andalucía continúe ayudando a los emigrantes que atraviesan una mala situación económica y están tan lejos de su querida patria”.