El buque de vigilancia ‘Yavire’ de la Armada venezolana atraca en Tenerife

Fue recibido por el cónsul general de Venezuela

El cónsul general entrega una placa conmemorativa al comandante del ‘Yavire’.

A su llegada, fue recibido por el cónsul general de Venezuela en las Islas Canarias, David Nieves Banchs, quien junto a otros miembros de la representación consular dieron la bienvenida a la tripulación del navío al frente de la cual está el Comandante Juan Carlos Oti.

Este buque fue recibido formalmente por las autoridades venezolanas el pasado 8 de noviembre en las instalaciones del astillero de Navantia en Cádiz y es el segundo de su clase que es entregado (tras el Guaicamacuto), en virtud del acuerdo suscrito entre los gobiernos de España y Venezuela en 2005 para la construcción de cuatro buques para la Armada Venezolana.

El ‘Yavire’ está dotado con una gran diversidad de equipos y tecnologías asociadas a la vigilancia en la mar, control de derrames de hidrocarburo, control del tráfico marítimo, búsqueda y salvamento, así como los medios necesarios para garantizar la presencia de la autoridad en la mar.

Este buque de vigilancia litoral tiene una eslora 80 metros y una manga 11,50 metros, pudiendo alcanzar una velocidad máxima de 22 nudos. Por otra parte su tripulación culminó con éxito la fase de formación y adiestramiento en tierra y a bordo relativos a los sistemas y equipos que conforman este navío.

El Comandante, Juan Carlos Oti, señaló que este buque tiene encomendadas múltiples tareas humanitarias, de apoyo y abastecimiento al conjunto de islas del litoral venezolano, así como las funciones propias de la lucha antidroga, el resguardo de los más de 2.000 km. de las costas venezolanas y el mantenimiento de la paz en su zona de actuación.

El navío partió en las primeras horas de la mañana hacia Venezuela para una vez allí ser recibido por las autoridades civiles y militares venezolanas.

El origen del nombre ‘yavire’

Esta unidad naval lleva por nombre ‘Yavire’ a modo de homenajea uno de los grandes caciques caribes, quien como hombre justo nunca dejó de escuchar los intentos de paz que proponían sus adversarios, sin dejar atrás su condición de gran guerrero y luchador incansable.

Entre sus mayores hazañas, en la zona Guyanesa está la unificación de las tribus que moraban en la región del Caroní y la extensión de su influencia hasta el norte del país, en lo que hoy conocemos como los Estados Sucre, Monagas y Anzoátegui. 

En Cumaná durante una batalla recibió una fuerte herida en el brazo derecho y al pedirle sus hombres que delegara el mando respondió: “Al enemigo hay que combatirlo más con el corazón que con los brazos” y remato diciendo: “Y todavía me sobra un brazo”. Finalmente su condición y arraigo a sus principios le permitieron luchar hasta su muerte bajo el fuego enemigo en Caicara de Maturín, dejando atrás un legado de luchas por la libertad de su pueblo.