El BNG no aceptará “maniobras de despiste” del PSOE en el cambio normativo del sufragio

Anxo Quintana descarga toda la responsabilidad de la iniciativa en la “voluntad de Zapatero”

Sostiene que el resultado de la reunión de la Diputación Permanente del Congreso revela que el trabajo y la “presión política” ejercida por el Bloque consiguió que la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, accediese a comparecer para hablar de la reforma del voto emigrante.
“Falta por despejar si hay voluntad política real del Gobierno central” de acometer una reforma, que consideró “urgente” e “imprescindible” para “salvaguardar la calidad de nuestra democracia”. “No aceptaríamos bajo ningún concepto que se pretenda marear la perdiz, hacer maniobras de despiste para encubrir la ausencia de una voluntad política real” de cambiar el voto emigrante, afirmó.
A este respecto, Jorquera señaló que lo que trata su fuerza política es una reforma “puntual”, por lo que demanda del PSOE que no se ampare en la necesidad de cambios más amplios en la legislación electoral, puesto que supondría que el cambio se prolongase en el tiempo. Para el BNG “es de urgencia preservar la calidad de los procesos democráticos y evitar que pueda haber manipulaciones”, dijo Jorquera, quien recordó que el año que viene Galicia celebrará elecciones autonómicas. Por tanto, “no nos valen disculpas de complejidades técnicas” para abordar la reforma, señaló, porque se trata de guardar la “pureza democrática” de los procesos democráticos.
“Vamos a ser muy exigentes” cuando comparezca la vicepresidenta, y reclamarán “compromisos concretos” del Gobierno, como que asuma los contenidos de la ley orgánica aprobada en el Parlamento gallego, y emplazó al Ejecutivo a que presente una propuesta en septiembre.
Tiempo de sobra
Si no lo hace es que no hay voluntad política, dijo, y revelaría que el PSOE “hace una cosa cuando está en la oposición y otra cuando está en el Gobierno y que no tiene la más mínima voluntad porque sabe que un voto así emitido es totalmente manipulable y a quien beneficia es al partido que está en el Gobierno”, concluyó.
Por su parte el vicepresidente de la Xunta y portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, instó a las tres fuerzas políticas gallegas a defender en Madrid lo mismo que ya se ha aprobado en Galicia. Con la reforma de la Ley Electoral lo que se pretende es terminar con una situación que Quintana tachó de “escándalo antidemocrático”.
“Tenemos tiempo de sobra, pero es necesario que el Gobierno tenga voluntad política de hacerlo. Depende de la voluntad de Zapatero”, afirmó Quintana, quien instó al presidente del Gobierno a tener en cuenta el acuerdo unánime de las fuerzas políticas de Galicia y comenzar la reforma de esta ley.
“Espero que Zapatero actúe de una vez por todas, que haga caso y que modifique la ley para que los emigrantes gallegos puedan votar en urna en las próximas elecciones, no hacerlo sería ir en contra de los gallegos y gallegas, de la voluntad de todas las fuerzas políticas y en contra de la transparencia democrática”, aseveró el vicepresidente de la Xunta.