La diputada del BNG en el Congreso, Rosana Pérez, ha presentado una proposición no de ley y una iniciativa parlamentaria en la Cámara Baja por las que insta al Gobierno a mantener operativa la Agencia Consular de Basilea en Suiza dado el alto número de emigrantes que viven y trabajan en el país helvético, y que precisan de una Administración consular próxima.
Rosana Pérez se dirige al Gobierno por la nota informativa de la Embajada española en Suiza que informa de la «suspensión de funciones a partir del 15 de septiembre» de la Agencia Consular de Basilea, y centralizar todo en la Embajada situada en Berna, a más de cien kilómetros de Basilea.
«Un cierre -puntualiza- que complicará los trámites y la prestación de ayuda administrativa y de otro tipo a los miles de emigrantes gallegos y gallegas y españoles que trabajan en el país suizo». Rosana Pérez recuerda también que miles de gallegos y gallegas se vieron obligados a emigrar durante los años 70 y 80, «emigración que se ha vuelto a reactivar en los dos últimos años debido a la grave crisis económica en el Estado español y la falla de trabajo y de perspectivas laborales, sobre todo en la juventud».
Además, subraya que muchos emigrantes que hacen uso del Consulado de Basilea son personas mayores, con problemas para viajar hasta Berna. «Por otro lado, tenemos a miles de jóvenes emigrantes nada familiarizados con el país y su lengua, así como en los trámites a seguir y que más que nunca precisan de atención por parte del Gobierno español».
Destaca que los desplazamientos hasta Berna suponen un gasto económico extra, sin olvidar la disponibilidad de tiempo en horarios laborales. «Desde luego el cierre del Consulado de Basilea ve en la dirección contraria que es la de no facilitar la atención a los emigrantes allí desplazados».
Para la diputada del BNG «el Gobierno español no puede huir de su responsabilidad para con los miles de emigrantes gallegos y gallegas que actualmente no tienen otra salida que emigrar en la búsqueda de un modo de vida que aquí se les deniega». La diputada nacionalista afirma que «resulta incomprensible que no sólo se desentienda de los ciudadanos mientras habitan en el territorio español, sino que es totalmente censuráble que además les dificulte la ayuda cuando deciden emigrar la otros países».