Los vistosos trajes andaluces y al calidad artística de las interpretaciones hicieron las delicias de los mayores.
Disfrutando los que podían ver bailar al Ballet ¡Iberoamericano, y hasta algunos de ellos danzando con ellas, los emigrantes españoles del Hogar de ancianos de Montevideo vivieron una distinta tarde del caluroso verano de la capital uruguaya. Los trajes andaluces, y el maquillaje de las bailarinas le pusieron el color a esa tarde. Pero mientras ellas aguardaban la orden de su directora, Lilian Morales, los emigrantes españoles iban ocupando sus lugares en la terraza del geriátrico.
Algunos llegaban por último, y es que debían ser movilizados en sus sillas de ruedas, en tanto otros ya ‘estaban haciendo boca’ mirando a las jóvenes elegantemente vestidas para la ocasión.
El despliegue de la escenografía y del baile de la raza calé, permitió que los abuelos que allí terminan sus días en esta tierra de exilio, disfrutaran de una calurosa tarde de verano totalmente distinta.
La directora del grupo, Lilian Morales explicó que le “gusta traer a las chicas en momentos que no hay romería en el Hogar, porque cuando la hay, ya están otros para bailar”.
Cabe destacar que tanto los abuelos como las jóvenes, y algunas que no lo son tanto, pero en su espíritu llevan esa bella jovialidad; mostraron en sus rostros la alegría de intercambiar ese momento mágico que a muchos les hacía recordar viejas épocas y a otros motivarles para seguir viviendo.
La jornada fue muy emocionante y divertida para todos los ancianos españoles que residen en el Hogar, que disfrutaron con la alta calidad artística de las bailarinas