Fernández Maillo señaló que este edificio histórico va a convertirse en un espacio público de acceso para los ciudadanos de la provincia, con una parte institucional que estaría ubicada en la parte noble y donde se está estudiando la posible ubicación del Archivo Regional de la Emigración y una segunda parte destinada a facilitar actividades culturales que es donde precisamente va a centrarse la intervención arquitectónica del proyecto.
El presidente de la Diputación recordó que el antiguo palacio provincial fue construido entre los años 1876 y 1883 y que contó con la colaboración de artistas tan destacados como Eduardo Barrón en la decoración de la fachada principal y de Ramón Padró en el salón de Plenos.
Según explicó el presidente de la institución, la Diputación tiene el objetivo de poner en valor y dar servicio público a sus edificios fruto de lo cual es la obra que se está realizando en el Teatro Ramos Carrión, en el edificio de oficinas de la Plaza de Viriato yen el proyecto de rehabilitación presentado.
Una gran sala de doble altura
Por su parte, los arquitectos Andrés Cánovas Alcaraz, Nicolás Maruri González de Mendoza, miembros del estudio Temperaturas Extremas, que resultó ganador del concurso y que deberán redactar el proyecto, fueron los encargados de explicar los detalles de la intervención arquitectónica.
En esencia, el proyecto trata de permanecer en segundo plano al respetar la parte noble, pero añadiendo elementos modernos en la parte destinada actualmente a oficinas que fueron incorporadas en los años 60 y que, carecen, de valor histórico.
En palabras del arquitecto Nicolás Mauri, el proyecto pretende trabajar con el concepto de grandes salas que fue lo que inspiraba la arquitectura del siglo XIX y añadir a las salas de la parte institucional, nuevas salas dedicadas a actividades culturales. Todo ello comunicando de forma encadenada los dos patios existentes en la parte noble con el tercero que se abrió en los años sesenta y donde de instalaría la gran sala expositiva de doble altura e iluminada por un lucernario.
Finalmente, el proyecto, dado que no se puede intervenir en la fachada principal y que ello dificulta el acceso a las personas, plantea intervenir en la actual enterada lateral dignificándola. En ella habrá luminosos móviles que informarán de la actividad cultural del interior y dará paso a un gran vestíbulo que, a su vez, permitirá la comunicación encadenada de los patios y la gran sala.