La ausencia del códice, que se guardaba en una caja fuerte del archivo, se descubrió el pasado 5 de julio, aunque la sustracción se produjo la semana pasada, según fuentes policiales. Los especialistas sugieren que un coleccionista se pudo haber encaprichado de la obra y haber pagado el hurto que no deja de ser sorprendente por su facilidad ante las escasas medidas de protección de un libro tan preciado. De hecho la Policía confirmó que las llaves estaban puestas en la puerta de la Cámara en la que se enconraba el Códice en el momento del robo.
El Códice Calixtino se trata de un manuscrito de mediados del siglo XII que recoge la primera guía para los peregrinos que seguían el Camino de Santiago. El documento, realizado bajo el papado de Calixto II (1119-1124), de quien toma su nombre, recoge descripciones de la ruta y de las obras de arte distribuídas por su recorrido, así como las costumbres de las gentes que vivían a lo largo del Camino. Entre sus páginas se incluyen sermones, milagros y textos litúrgicos relacionados con el Apóstol Santiago.