La elección de San Sebastián como Capital Europea de la Cultura 2016 ha irritado al resto de ciudades candidatas a esta nominación -Córdoba, Burgos, Zaragoza, Las Palmas de Gran Canaria y Segovia- y, de hecho, algunos de sus representantes estudian impugnar la decisión del jurado, informó EFE. Su presidente, Manfred Gaulhofer, esgrimió como uno de los méritos el esfuerzo de la ciudad para superar su historia de violencia y que su designación podría contribuir al cese de la misma, lo que no ha sentado bien a las otras ciudades por entender que han imperado criterios “políticos” ante los proyectos culturales.Unas palabras de calado que, nada más pronunciarlas, provocaron una reacción inmediata de los responsables de las candidaturas derrotadas, especialmente entre los de Córdoba y Zaragoza. Tras la nominación, la exalcaldesa de Córdoba y actual ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar, la calificó de “grave error” y lamentó que el jurado hubiese tenido en cuenta el argumento político de la pacificación.El alcalde de Zaragoza Juan Alberto Belloch, ha anunciado su intención de estudiar la impugnación.