Camps realizó estas declaraciones en la colocación de la primera piedra de las obras del Sistema Integral de Saneamiento, Depuración y Reutilización de L'Alacantí Sur.
En su intervención, el Jefe del Ejecutivo valenciano ha destacado que la Comunidad reutiliza 128 litros por habitante y día, una cifra que ha calificado de “importante si se coteja con las comunidades autónomas limítrofes que reutilizan entre 4 y 14 litros por habitante día”.
“Este dato se convierte, en palabras de Camps, en una clara demostración de que nuestra exigencia tiene toda la justicia requerida” y ha añadido que esta primera piedra “consolida el camino emprendido por la Comunidad para ser los “más eficaces y eficientes en el uso del agua”, ha declarado.
La Comunidad Valenciana se sitúa a la cabeza en la depuración y reutilización del agua en España, ya que uno de cada dos litros de agua reciclados en todo el país salen de plantas valencianas.
Cabe recordar que el Consell, tras culminar el primer Plan Director de Saneamiento y Depuración de la Comunidad Valenciana, ya ha ejecutado el 85 por ciento del segundo Plan Director.
Así, la Comunidad cuenta con 426 depuradoras en todo el territorio, que depuran el 99 por ciento de las aguas residuales de la población, y reutiliza 232 hectómetros cúbicos al año, llegando en esta Legislatura a los 350.
Al respecto Camps ha afirmado que “nunca un pueblo exigió con más garantía un elemento tan necesario como el agua, trabajando para justificar esa exigencia y esa petición”.
Por último, Camps ha concluido que “los que continuamos haciendo inversiones en torno al uso eficiente y además responsable del agua seguimos haciendo inversiones y los que hablaban de otros sistemas ya no hablan. Nosotros seguimos el camino emprendido”.
Depuradora L´Alacantí Sur
Esta nueva depuradora, en la que el Consell invertirá un total de 39.675.244 euros y que forma parte del Plan de Infraestructuras Hidráulicas de la Comunidad Valenciana, tendrá una capacidad de tratamiento de 30.000 metros cúbicos al día (cuatro hectómetros cúbicos de agua al año) y generará un total de 1.000 empleos.
Con ella, se tratarán las aguas residuales procedentes de San Vicente del Raspeig, del polígono industrial del Plá de la Vallonga y de la futura expansión urbanística de Alicante. Además, es una planta sostenible e integrada en el entorno que cuenta con unas instalaciones de eficiencia energética que evitarán la emisión a la atmósfera de más de 1.140 toneladas al año de CO2.