Begoña Serrano clasusuró el segundo curso de la cuarta promoción de la Escuela de Verano de Asturianía

Once chicas y doce chicos estudiaron la especialidad de gaita o baile tradicionales

Begoña Serrano con los alumnos de la Escuela de Asturianía.
Una de las actuaciones de los alumnos.
Una de las actuaciones de los alumnos.
Una de las actuaciones de los alumnos.
Una de las actuaciones de los alumnos.

Un total de  23 jóvenes, doce chicos y once chicas, procedentes de 19 comunidades de seis países diferentes, han finalizado el segundo curso de la cuarta promoción de la Escuela de Verano de Asturianía que, organizada por el Consejo de Comunidades Asturianas, ha recuperado la formación en cultura tradicional para monitores procedentes de la emigración que suspendió el pasado año el anterior Ejecutivo autonómico.

La directora general de Emigración, Begoña Serrano, fue la encargada de clausurar en Candás un curso con el que la escuela alcanza “el centenar de alumnos y alumnas, cien monitores que en centros y casas de Asturias distribuidos por todo el mundo representan la mejor herramienta para mantener vigentes con las generaciones futuras los lazos con el Principado”, subrayó.

Las clases, que comenzaron el pasado 15 de julio, se impartieron en las instalaciones del Instituto Adolfo Posada, en Oviedo, y se desarrollaron en jornadas de ocho horas lectivas. Las materias que estudiaron los jóvenes fueron cultura y sociedad, lengua y literatura asturiana, folclore, percusión, gaita y baile tradicional. La mayoría de estudiantes procedían de las casas y centros asturianos de América Latina: doce de Argentina (Tucumán, Rosario, Comodoro-Rivadavia, Mar del Plata, Mendoza, Buenos Aires, Santa Fe, Paraná, La Plata); tres de Chile (San Fernando, Valparaíso, Santiago); uno de México D.F y uno más de Sao Paulo, en Brasil. Otros cinco procedían de centros asturianos de Vitoria, Logroño, Valladolid y Barcelona, y uno más de la colonia asturiana en Bruselas.

Begoña Serrano aseguró ante los alumnos que terminaban su formación que esta escuela “permite hacer efectivo el derecho de los asturianos en el exterior a conocer y utilizar la propia lengua y cultura asturiana”, lo que la convierte en una herramienta que “ha tenido una evidente y positiva incidencia en el aumento de bandas de gaitas y grupos de baile en las comunidades de origen y en la implicación de jóvenes en estos colectivos”.

Asimismo, añadió que en 2013 se ha conseguido por primera vez “proyectar esa formación en acontecimientos internacionales tan importantes como el Festival Intercéltico de Lorient y el organizado en Suiza por el Centro Asturiano de Lausanne”, por lo que el Principado seguirá trabajando para que esta tarea tenga continuidad.

La directora se refirió también en su intervención al IV Plan de Emigración 2013-2016 aprobado ayer el Consejo de Gobierno del Principado, para destacar que “la juventud será un pilar importante” dentro de sus actuaciones. “Somos conscientes de los jóvenes representan el futuro de la Asturias en el exterior y tienen la llave para seguir defendiendo esta tierra como lo han hecho vuestros antecesores”, explicó. En su despedida a los jóvenes alumnos, Begoña Serrano les invitó a regresar el próximo verano para completar su formación en Asturias, “una tierra que os reconoce y os pertenece”, aseguró.

La Escuela de Verano de Asturianía, que inició su andadura en 2002, se convoca con la finalidad de formar a monitores de cultura asturiana en la especialidad de gaita y baile, favorecer el conocimiento de la cultura y las tradiciones autóctonas, y reforzar los vínculos que unen a los emigrantes pertenecientes a centros y casas de Asturias repartidos por el mundo. Se trata, además, de que las nuevas generaciones conozcan la realidad de la Asturias actual y convivan con jóvenes de otros colectivos, creando una red que estreche los lazos con la tierra natal de sus padres y abuelos.

En el desarrollo de este programa, que cuenta con un presupuesto de 39.086 euros, colaboran la Federación Internacional de Centros Asturianos (FICA), el Instituto Asturiano de la Juventud y el Instituto Asturiano de Administración Pública ‘Adolfo Posada’.