Asuntos Exteriores propone reorganizar el mapa de embajadas y consulados

Francia y Alemania acogen muchas legaciones por la elevada emigración en décadas pasadas

Figa, que compareció ante la Comisión de Presupuestos de la Cámara Alta para explicar las cuentas de su departamento en 2010, señaló que los cambios que plantea en las legaciones diplomáticas españolas no se harían de una forma drástica “ni causando ningún destrozo”, pero sí de manera progresiva.

De esta forma, ha señalado que los nueve consulados que funcionan en Francia y los siete en Alemania se abrieron en un momento concreto, en el que había mucha emigración española hacia esos países, una situación que ya no existe.

Y aunque ha aclarado que esto no significa que haya que introducir modificaciones precisamente en esos consulados, sí los ha mencionado como ejemplo de una posible reorganización.

Esta es una de las cuestiones a las que se ha referido la subsecretaria de Estado durante su comparecencia, a petición de la senadora del PP Luz Elena Sanín, quien le ha pedido explicaciones por la insuficiencia presupuestaria en algunos capítulos de su departamento, y el incremento de otros.

La senadora popular ha expresado su disconformidad, entre otros recortes, con el que, en su opinión, afectará al área exterior, justo cuando va a comenzar la Presidencia española de la UE, una oportunidad, ha dicho, para que España alcance proyección en el exterior y recupere “el puesto que le corresponde” en la escena internacional.

También ha mostrado su desacuerdo con la nueva partida dedicada a la acción diplomática en el ámbito económico, que no figuraba en el ejercicio anterior, según ha recordado, y que, a su juicio, podría duplicar la asignación presupuestaria de las embajadas, lo que contravendría así “la austeridad que solicitamos”.

María Jesús Figa ha insistido en que el presupuesto del Ministerio de Exteriores para 2010 -3.451 millones de euros, un 5 por ciento inferior al ejercicio actual- ha sido elaborado teniendo en cuenta la corresponsabilidad presupuestaria para contribuir a la salida de la crisis cuanto antes.

El “grueso” del recorte, ha afirmado, corresponde al gasto financiero (132 millones menos) y fundamentalmente en lo que se refiere a la cooperación, aunque ha asegurado que se mantienen las líneas “básicas” de este ámbito.