Muchos españoles continúan varados en Argentina y claman por regresar

Son muchos los españoles tratando de volver a su patria, entre ellos se encuentran personas sin dinero, con graves problemas de salud, que tienen familiares solos en España que los esperan hace varios meses y muchos casos más que necesitan respuesta.

María Elena Malluguiza, valenciana que vive en Alicante y se encuentra en la ciudad de Corrientes, ubicada al nordeste del país explicó a España Exterior que llegó a Argentina el pasado 5 de marzo y desde entonces está en casa de sus hijos “porque vine a conocer a mi nieta recién nacida”. Tenía previsto regresar a España el pasado 25 de marzo, pero el vuelo de Aerolíneas Argentinas fue cancelado.

Escuchó entonces que había que inscribirse en el Consulado de España para acceder a algunos de los vuelos especiales y se inscribió en el Consulado de España en Buenos Aires. “Unos días después me comunican que los que estuviéramos en mejores condiciones que nos diéramos de baja, que fuéramos solidarios, que luego iba a haber posibilidades de darnos de alta nuevamente”. Así lo hizo, pero piensa que “pequé de ingenua porque pasó el tiempo y nadie se comunicaba conmigo”.

Por ese motivo, decidió darse de alta de nuevo y “me enteré que a lo largo de abril habían partido cuatro vuelos de repatriación, que habían culminado los vuelos de Iberia y que el Gobierno argentino había prohibido la venta de pasajes aéreos hasta el 1 de septiembre”.

En se momento habló con la Embajada española “y me dijeron que tenía que inscribirme en el Consulado de España en Rosario ya que Corrientes pertenece a esa demarcación consular, y estar atenta a las redes sociales de la Embajada y el Consulado para enterarme de las novedades, pero realmente es una pesadilla porque los tickets para los vuelos que puso Aerolíneas se terminan en 10 minutos. No he logrado comprar ninguno y en un estado de nervios constante”, sostiene angustiada.

Además, agrega que “el costo es elevadísimo porque tienes que pagar el pasaje con el 30 por ciento de recargo, que es el impuesto que hay en este país para pasajes al exterior más el costo del viaje para desplazarme a lo largo de 1.000 kilómetros desde Corrientes hasta Buenos Aires”. Y añade: “Lo que más me angustia es la incertidumbre de no saber cuándo podré volver. Esto no es vida”.

María Elena dice que “sería importante que los cónsules y otros a quienes les corresponde atender a los españoles que se encuentran en el exterior hicieran bien su trabajo porque cuando me he comunicado con el Consulado en Rosario contestan amablemente pero no dan ninguna respuesta satisfactoria, solo estar pendiente de las redes y cuando pregunté si podían ayudarme para ir desde Corrientes a Buenos Aires, me dijeron que el desplazamiento corría por mi cuenta”. Por otro lado, he tratado de comunicarme a través de dos teléfonos con el vicecónsul en Corrientes y ninguno de los números está operativo, fui hasta la dirección que aparece en Internet y tampoco encontré a nadie”, asegura.

Por su parte, el español Antonio Feria logró regresar en el vuelo del martes 12 de mayo a Barcelona -él reside en Mollet del Vallès, que está a pocos kilómetros de la capital- después de tres meses y medio en Argentina.

Antonio había arribado a Córdoba el pasado 28 de enero para visitar a su hijo y único nieto, quienes residen en esta ciudad. Tenía pasaje de regreso para el 9 de abril, pero fue cancelado dos veces y después no se volvieron a comunicar con él. “Nos comunicamos con la Embajada y nos dijeron que había vuelos de repatriación a través de Iberia. Intentamos conseguir, pero no lo logramos. Luego nos dijeron que Aerolíneas Argentinas había puesto varios vuelos, entramos a la web y después de cuatro intentos lo conseguimos. Entre el pasaje de avión y el bus que me trasladó desde Córdoba a Buenos Aires gasté 1.000 euros”.

Antonio señala que “gracias a mi hijo que se comunicó con el Consulado en Córdoba conseguí un lugar en el bus que partió el lunes 11 a la noche hacia Ezeiza, de lo contrario hubiera quedado varado aquí hasta que terminara la pandemia ya que está prohibida la circulación por tierra y aire dentro del país”.

También destaca que le urgía viajar porque su señora no está bien de salud y se encuentra sola en España. Por último, confiesa: “Me siento un poco triste porque viajé más de 10.000 kilómetros para ver a Aíto, mi único nieto, que tiene 7 años, pero a causa del aislamiento obligatorio pude estar con él pocas veces ya que se encuentra con su mamá en otra casa, por lo que la mayoría de las comunicaciones que tuvimos fueron por videollamada y al partir no pude darle un beso ni abrazarlo”.

Regresar a Sanxenxo con 90 años

Ana María Méndez está en Buenos Aires con su mamá de 90 años, que nació en Pontevedra. “Mamá y yo vivimos en Sanxenxo, allí viven también mi hijo y mi único nieto. Vine a Argentina porque estoy tramitando mi jubilación ya que nací aquí y desarrollé mi vida laboral en Argentina”.

Explica a España Exterior que ambas tenían pasaje para el 26 de marzo por Air Europa “y nos lo cancelaron”. Ahora, lo que más le preocupa “es la salud de mi madre porque se encuentra muy deprimida a raíz de esta situación. Extraña mucho a sus hermanos, son siete en total incluida ella”, explica Ana María.

Se muestra muy crítica con la Embajada. “Lo que me da más bronca es que no exista una respuesta de la Embajada. Ellos no conocen el número de españoles varados aquí –según las estimaciones que tenemos son 1.200 o más–. He llamado varias veces, pero no obtengo respuesta a nuestro problema, solo hablan de sus logros, que han organizado siete vuelos, pero en concreto no dan ninguna solución”.

Explica que “estoy en el grupo de Whatsapp ‘Varados en Argentina’ y a todos les sucede lo mismo, no tengo posibilidades de comprar los pasajes porque en pocos minutos se terminan”. Otro problema que le plantea es que los vuelos llegan solo a Madrid y “desde allí tenemos que buscar un transporte para llegar a Galicia. Y no me animo a exponer a mi mamá por su edad y su salud el tiempo de espera en Madrid”.

Aunque sabe que el día 21 de mayo parte otro vuelo hacia España considera que las autoridades “siguen con la misma equivocación”. “Hasta que la Embajada no conozca la cantidad de españoles que hay y los lugares de destino en España, seguiremos indefensos. Deberían hacer listados para saber que en un vuelo determinado un grupo de personas va hacia Mallorca, otro a Vigo, otro a Málaga, etc., habría coordinación y todos llegarían seguros a sus hogares”, propone Ana María.

“Necesitamos que alguien nos escuche”

Carmen Pérez Cereijo y su esposo Manuel, de Ponferrada, llegaron el pasado 26 de febrero a Argentina por Alitalia para visitar a unos familiares que viven en la localidad de Francisco Solano, en el Gran Buenos Aires. “Nos costó mucho reunir el dinero para comprar el pasaje porque somos humildes y tenemos cinco hijos que mantener”, cuenta Carmen que explica que “teníamos pasaje de regreso para el 28 de abril, pero un mes antes de esa fecha la empresa nos canceló el vuelo y prometieron devolvernos el dinero, cosa que no han hecho”. Ahora deben manejarse por su cuenta. “Llamamos a Embajada, Consulado…nadie nos da una solución”.

Señala que “con mucho esfuerzo conseguimos comprar dos pasajes para el 27 de abril por Iberia, ese día fuimos al aeropuerto y junto a otras 20 personas, justo cuando estábamos haciendo el ‘check in’ nos dijeron que no podíamos abordar ese vuelo, nadie nos avisó previamente, y aunque hemos llamado a la compañía no nos dan solución”.

Carmen dice que tampoco pudo conseguir lugar en los viajes que realizó Aerolíneas Argentinas hacia Madrid. “No sabemos si hay listas en el Consulado o en la Embajada, nadie nos responde, Iberia dice que hay que apuntarse en el Consulado, el Consulado afirma que no, que los billetes los vende Iberia. Estamos desesperados, no sé manejar redes sociales, pero necesitamos que alguien nos escuche. Somos españoles y como tal exigimos que se nos trate”, sostiene Carmen con convicción.